La consellera de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat, Gemma Ubasart, ha pedido que, si se tira adelante la reforma del delito de malversación, se haga con «rigor y no desde una batalla partidista».
En una entrevista este domingo en el diario 'La Vanguardia' recogida por Europa Press, ha añadido que esta reforma «tiene que ser muy quirúrgica y bien orientada a que no sea que la corrupción no esté penada».
Según ella, la derogación del delito de sedición era una necesidad, pero ha destacado que «tiene que ser coherente con el respeto de los derechos fundamentales y tiene que garantizar el derecho a protesta».
Ha dicho que trabajará para que la comisaría de Via Laietana de Barcelona se convierta en un centro de memoria democrática: «Creemos que el Gobierno puede estar en sintonía y trabajaremos para lograrlo en nuestro mandato».
Plan antiocupación
Al preguntársele sobre su desvinculación del plan antiocupación de la exconsellera Ciuró, ha respondido que la modificación que se proponía «genera inseguridad jurídica y puede generar dificultades de gestión».
Y ha asegurado que han creado un grupo de trabajo con la Conselleria de Interior «para hacer un diagnóstico, pensar medidas, y reformas normativas si es pertinente».
Ha afirmado que su objetivo es «contenciones mecánicas cero» a los presos, pero ha dicho textualmente que no se puede ser simplista y que hace falta mucho rigor y seriedad.
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