En un comunicado, han hecho hincapié en que la región, que es «polo de atracción de inversión y demandantes de empleo de otras provincias y países», registra un aumento del paro y del empleo. Esto, según han sostenido, puede ser «debido a que el impulso en la creación de puestos de trabajo impulsa a que cada vez más personas demanden empleo en esta comunidad autónoma».
Por otra parte, en cuanto a los datos a nivel nacional, apuntan a que la tasa de paro se situó al finalizar 2022 en el 12,87%, lo que aleja aún más a España «de la media europea». En este contexto, los empresarios madrileños han criticado que este año comience con más costes de Seguridad Social a empresas y trabajadores. «Resulta aberrante ya que supone aumentar las dificultades para la contratación de desempleados», han apuntado.
Asimismo, desde la patronal han lamentado que «en el último trimestre del año haya crecido la plantilla pública (20.000 personas), mientras que el sector privado ha perdido más de 100.000 efectivos».
En este sentido, han recordado que «la creación de empleo depende solo del dinamismo económico y la libertad empresarial». «Ambos elementos se resienten cuando el objetivo del Gobierno es apostar por una sociedad subsidiada, desincentivando a los perceptores de ingresos de protección social a buscar empleo activamente», han señalado.
CEIM ha estimado que la actividad económica privada «es la base para obtener recaudación tributaria». Por tanto, ha considerado que «deberían articularse medidas para incrementar la cifra de empresas y el tamaño de las mismas». «Es muy lamentable que España haya perdido 111.200 autónomos el año pasado», ha señalado.
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