Con esta suman 20 las bajadas y supresiones de impuestos aprobadas esta legislatura por PP y Vox, que, según los cálculos del Gobierno madrileño, aumentarán a 700 millones anuales el ahorro global para los contribuyentes madrileños. Entrará en vigor el próximo mes de abril, cuando se publique en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM).
La rebaja respaldada en la Asamblea legislativa incluye tres nuevas deducciones relacionadas con el cuidado de personas mayores en el entorno familiar; arrendamiento de viviendas y los estudios superiores; así como la ampliación del porcentaje de deducción de otras tres ya en vigor. «Las tres beneficiarán a cerca de 700.000 contribuyentes madrileños con un ahorro de hasta 92 millones de euros en el IRPF en la declaración de la renta de 2023», han indicado desde el Ejecutivo.
En cuanto a las de nueva creación, la primera está dirigida a las familias, con una deducción de 500 euros por el cuidado en casa de ascendientes mayores de 65 años o con discapacidad. Otra permitirá desgravarse el 10% de los gastos relacionados con el alquiler de la vivienda arrendada como, por ejemplo, los de conservación o reparaciones.
La última de las novedades tributarias está enfocada al ámbito de los estudios superiores. Así, aquellas personas que quieran cursar un grado, máster o doctorado y tengan que pedir un préstamo para esa finalidad, podrán deducir el 100% de los intereses.
Asimismo, la reforma de la Ley de medidas fiscales aprobada por al Asamblea contempla el aumento de otras rebajas ya existentes, como la relacionada con los gastos de enseñanza de idiomas, que pasa del 10% al 15%, o la extensión de la deducción por cuidado de hijos al de mayores en situación de dependencia o discapacidad. De esta forma, las familias madrileñas que contraten a una persona para ese fin podrán deducir el 25% de los gastos de cotización a la Seguridad Social, hasta 450 euros. Las familias numerosas incrementarán este porcentaje al 40%, con un límite de 600 euros.
También se ampliará del 30% al 40% la desgravación vinculada a la adquisición de acciones y participaciones sociales de nuevas entidades o de reciente creación, así como el límite general de deducción anual que pasa de 6.000 a 9.000 euros. Para poder acceder a ella habrá que cumplir, entre otros requisitos, que la participación se mantenga un mínimo de tres años; que la entidad tenga su domicilio social y fiscal en la Comunidad; que desarrolle una actividad económica; o que, en el caso de la ampliación de capital, dicha entidad hubiera sido constituida dentro de los tres años anteriores a la operación.
"irrelevante e ínfima", critica vox pese a apoyarla
En el debate parlamentario, el diputado de Unidas Podemos Tito Morano ha sostenido que ver aprobar la última rebaja fiscal del PP de la legislatura es como «ver el último partido de Cristiano Ronaldo». «Que lo disfruten, no van a vivir otra», ha lanzado a continuación, al tiempo que ha censurado la gran «erosión» que se están haciendo las deducciones a las arcas públicas.
A continuación, el parlamentario de Vox José Luis Ruiz Bartolomé ha indicado que esta es una Ley «irrelevante e ínfima», con un conjunto de reducciones fiscales «que solo suponen pequeños ahorros a unos cuantos madrileños» pero entiende que, en todo caso, es «bienvenida». Aun así, ha insistido en su escaso impacto y en que es «puro marketing».
El diputado del PSOE Fernando Fernández ha reiterado que el modelo del PP no es el suyo, ha afeado que pongan «parches fiscales» y ha denunciado que durante la tramitación de este ley hayan rechazado sus enmiendas. Los socialistas apuestan por un «reparto con sentido común del esfuerzo fiscal que realizan los madrileños».
Por su lado, el parlamentario de Más Madrid Eduardo Gutiérrez ha lamentado que esta normativa sea «un muro de injusticia fiscal» con deducciones que «no discriminan ni focalizan y tratan a todos por igual cuando no lo son en términos de contribuir a los gastos comunes de la Comunidad de Madrid».
El diputado del PP Álvaro Ballarín ha defendido que las rebajas fiscales que han impulsado no son para los ricos sino para «todos los madrileños» y ha sacado pecho de que desde su partido no hacen una «bajada generalizada» sino que los reducen y comprueban cómo ha ido la recaudación. «Entendemos que los mejores asignadores de los recursos son las familias, el mercado y las empresas», ha remarcado.
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