El plan incorpora la puesta en marcha de un nuevo Observatorio de vigilancia y control del mercado inmobiliario y la creación de un registro único de viviendas turísticas, con la colaboración de las tres administraciones, para contrastar si las viviendas tienen los permisos y pagan los impuestos por la actividad económica que realizan. Con ese registro se podrá sancionar y clausurar los pisos que no se ajusten a la normativa urbanística, sectorial o fiscal.
De la mano de esta iniciativa se instaría al Gobierno de España para que, a través de la Ley de Vivienda o la de Consumo, acuerde con las plataformas que sólo publiquen en sus webs las VUT que tengan licencia.
Maestre, acompañada por el concejal Jorge García Castaño y la candidata Lucía Lois, ha mantenido un encuentro con vecinas y vecinos del distrito Centro, con los que ha realizado un recorrido por algunas de las calles más afectadas por los pisos turísticos ilegales, como Espoz y Mina, Santa Ana, Príncipe, plaza de Santa Ana, Prado, León, Huertas, Fúcar y Alameda.
La candidata ha cifrado en 17.000 los pisos turísticos, de los que «un 99 por ciento» son ilegales, para culpar de esta situación al alcalde, José Luis Martínez-Almeida, por su «falta de control». «Compiten ilegalmente con el sector hostelero y lo único que ha hecho Almeida ha sido eliminar las inspecciones, el control», ha lamentado Maestre, que ha subrayado que esta situación se da cuando el mayor problema que sufre Madrid es el acceso a la vivienda.
Un cuerpo de inspección específico similar al de ser
Rita Maestre se ha comprometido «a reactivar de forma urgente el plan de inspección sobre las viviendas de uso turístico procediendo al cierre de todas aquellas que no cumplan la normativa urbanística». A medio plazo pondrían en marcha un cuerpo de inspección específico, similar al del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) para que controle el correcto uso de las viviendas en Madrid.
«Para que se cumpla (la norma) hace falta inspección. Vamos a recuperar ese cuerpo de inspectores que Almeida ha reducido de 40 a 10», se ha comprometido la también jefa de la oposición.
Más Madrid sigue a la espera de la respuesta del Defensor del Pueblo, al que recurrieron ante la reducción de las inspecciones a este tipo de viviendas. «Lo que ha pasado es que esas viviendas turísticas han seguido creciendo, 5.000 más en el último año sólo en el centro de la ciudad de Madrid», ha alertado la concejala.
«Vamos a seguir acudiendo a todas las instancias necesarias, como hicimos con el Defensor del Pueblo, pero sobre todo vamos a hacer lo posible para cambiar el gobierno de la ciudad porque depende de su voluntad política actuar o no contra este negocio ilegal que tiene consecuencias directas en la calidad de vida de los vecinos», ha aseverado.
«Mientras unos y otros se pierden y nos hacen perder el tiempo en polémicas protocolarias, en discusiones que le interesan más o menos al cero por ciento de los madrileños, aquí hay una fuerza política que está dedicada a proponer y hablar de los problemas de Madrid y que entiende que una campaña electoral es para proponer proyectos y resolver problemas», ha lanzado la candidata de Más Madrid, que ha insistido que se presentan a las elecciones «para gobernar, no para perder el tiempo».
Maestre ha subrayado la «pasividad de este Gobierno municipal» ante la «expulsión del centro de miles de vecinos», un proceso que está convirtiendo «los barrios más castizos de Madrid en lugares sin vida, sin vecinos, dedicados sólo al turismo ilegal».
"los vecinos son una especie en extinción"
Desde la Asociación de Vecinos de Sol y Barrio de las Letras su presidente, Víctor Rey, ha lamentado que en este punto de Madrid «prácticamente ya no quedan vecinos». «Los que quedan son algo residual, una especie de extinción», ha señalado.
«El crecimiento de las viviendas turísticas ha sido exponencial sin que la Administración, tanto municipal como autonómica, haya hecho nada. Se ha dejado abandonados a los vecinos y lo único que ha conseguido ha sido destrozar el barrio, desfigurar el contenido social de los barrios», con la consiguiente repercusión también en el comercio, ha descrito Rey.
El centro de Madrid es ahora mismo «un parque temático». «Se ha apostado por ese parque temático en detrimento de la vecindad», ha condenado el presidente de la asociación ciudadana, que ha contabilizado unas «6.000, 7.000 viviendas turísticas» sólo en ese punto de la ciudad.
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