La marcha del Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha llegado este jueves a Vitoria-Gasteiz para reclamar que «se complementen las pensiones mínimas hasta los 1.080 euros», así como solicitar unas «pensiones dignas» y denunciar «los recortes de las pensiones».
Cientos de personas están secundando la manifestación que recorre las calles de la capital alavesa como colofón a las marchas que el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria inició el pasado lunes desde Bilbao y Bergara, y a la que se unió una tercera este martes desde Salvatierra.
Las tres marchas se han juntado en la zona gasteiztarra de Gamarra para discurrir hasta la Plaza Nueva, punto neurálgico de las concentraciones de los pensionistas en Vitoria-Gasteiz, y nuevamente partir hacia la Catedral Nueva y, posteriormente, el Parlamento Vasco, donde tienen previsto entregar sus reivindicaciones a los diferentes grupos políticos.
El colectivo de pensionistas ha convocado estas nuevas movilizaciones tras «más de cinco años reivindicando una pensión mínima de 1.080 euros en 14 pagas, por considerar que responde a los criterios de suficiencia fijados en la Carta Social Europea (CSE)».
Vida digna en la vejez
Según han remarcado, se trata de «un ingreso básico para que una persona pensionista pueda acceder a una vida digna en su vejez y es, además, una medida efectiva para reducir la brecha de género en las pensiones».
Asimismo, han apelado tanto al Gobierno de España como a los Gobiernos de Euskadi y Navarra para que «garanticen a la ciudadanía unas condiciones de vida dignas, que, en el caso de las personas mayores y pensionistas que no disponen de ingresos procedentes de su trabajo, pasan por garantizar unos ingresos mínimos suficientes».
Desde el Movimiento de Pensionistas han denunciado que, «en el actual contexto de crecimiento exponencial del coste de la vida cada vez un mayor número de personas mayores y pensionistas ven truncadas sus posibilidades de acceder a una vivienda saludable y adecuada a sus necesidades, una alimentación sana, y garantizar su salud y la atención efectiva para paliar sus necesidades de atención a la dependencia».
Brecha de género
Además de reivindicar una pensión mínima de 1.080 euros, el movimiento de pensionistas ha reclamado «el 100% para las pensiones de viudedad», así como «derogar las reformas laborales de 2011 y 2013», entre otras reivindicaciones.
En este sentido, los pensionistas han denunciado que la inmensa mayoría de las personas que cobran una pensión por debajo de los 1.080 euros «son mujeres».
«La pensión mínima en todas sus variables tiene nombre de mujer». Es algo que se constata en la brecha de género que tiene como antecedente la desigualdad de salarios y la asignación unilateral de las mujeres al trabajo no remunerado o mal pagado en el ámbito de la reproducción y los cuidados", han criticado.
El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha defendido que «empleo de calidad, mejores salarios y la eliminación de la brecha son, además de un derecho, la garantía del futuro de las pensiones por los ingresos adicionales que supondrían».
El colectivo ha valorado «muy positivamente» la respuesta que han tenido las convocatorias y marchas de esta semana a lo largo y ancho del País Vasco, así como el «gran recibimiento» que han tenido al paso por todas las localidades por las que ha circulado la marcha reivindicativa.
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