Archivo - Un joven pasea en patinete por la céntrica calle de Fuencarral, en Madrid (España) a 5 de octubre de 2020. | Ricardo Rubio - Europa Press - Archivo

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Un joven de 18 años fue agredido hace unas semanas y quedó en el suelo inconsciente por los golpes propinados por dos individuos que le querían robar su patinete eléctrico en la localidad de Ciempozuelos, han confirmado a Europa Press fuentes municipales y de la Guardia Civil.

Los hechos tuvieron lugar el pasado 30 de octubre cuando un adolescente salía por la noche a reunirse con los amigos en una plaza. En el trayecto se cruzó con un joven que, cuchillo en mano, le amenazó con rajarle si no le daba el patinete en el que iba montado. Pero la víctima del robo le dio una patada y huyó del lugar.

Acalorado, se encontró con sus amigos, a quienes contó lo que había sucedido. Poco después volvió a casa con tan mala suerte que se encontró de nuevo con el ladrón, pero el chico volvió a negarse a entregarle el patinete. En ese momento un compinche del 'caco' le dio un fuerte en la espalda, tumbándole en el suelo inconsciente.

La violenta escena fue vista por algunos vecinos, que salieron a auxiliar a la víctima, al igual que sus amigos, que venían detrás. Los delincuentes huyeron del lugar a la carrera sin el ansiado patinete.

El chico recuperó la consciencia poco después y fue conducido al centro de salud, donde fue asistido de un fuerte golpe en la mandíbula y lesiones en la mano. La Policía Local y la Guardia Civil intentaron localizar sin éxito a los ladrones.

El agredido, acompañado por su madre, formalizó el 1 de noviembre una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Ciempozuelos, donde detalló los hechos, señalando que los agresores eran dos jóvenes de origen magrebí. Los agentes ahora investigan el caso de robo con violencia e intimidación y están buscando a los autores.

Según ha publicado hoy 'ABC', la familia de la víctima sospecha de que pudieran ser habituales del lugar, ya que escaparon por un punto que solo conocen los vecinos. La madre del chico asegura que él no tiene miedo tras lo sucedido, pero sí «mucha impotencia», al tiempo que solicita más presencia policial.