Fue el pasado sábado cuando CC.OO., con el apoyo de UGT, decidió convocar cinco días de huelga en la hostelería de la Comunidad de Madrid ante el «estancamiento» de la negociación del Convenio Colectivo de Hostelería y Actividades Turísticas de la región tras once meses de reuniones.
«Hemos intentando acercar posiciones desde este lunes, pero no es fácil. La patronal se contradice en sus propuestas: nos plantean una subida del 12% en tres años mientras que manifiestan en medios que ofrecen el 15%. La última oportunidad será mañana», ha explicado la secretaria general de la Federación de Servicios CC.OO Madrid, Ángeles Balué, en declaraciones a Europa Press.
La propuesta de los sindicatos pasa por incremento salarial del 15% en tres años (un 7% para 2023, 4% para 2024 y 4% para 2025), la regulación del contrato fijo discontinuo a tiempo parcial, la mejora en los criterios de ascensos y la adaptación normativa laboral actual en el convenio.
«Lo que nosotros esperamos es responsabilidad y cambio de actitud de la patronal. Para poder garantizar la estabilidad que se necesita en este sector, que es importante para la economía de la región, no debería haber malas condiciones laborales, ni precariedad, ni salarios bajos», ha defendido el responsable del sector de hostelería de UGT Madrid, Daniel Pezuela, en declaraciones a Europa Press.
Balué ha defendido que «tienen esperanzas» de poder llegar a un acuerdo, pero ha recalcado que «para ello la patronal debe responder con una buena propuesta». Asimismo, ha subrayado que para CC.OO. es «necesario» la regulación de la contratación del fijo discontinuo.
Por su parte, Pezuela ha apuntado que los trabajadores «necesitan garantías de recuperar el poder adquisitivo que se ha perdido en los últimos años». Además, ha explicado que UGT también busca que el acuerdo incluya «unas condiciones dignas de trabajo, como en los aspectos de ascensos o seguro de invalidez/fallecimiento».
La patronal, "optimista"
En declaraciones a Europa Press, el director general de Hostelería Madrid, Juan José Blardony, ha reconocido que la patronal «es optimista» ante la reunión de este viernes. En este sentido, ha detallado que el paquete económico que ha puesto encima de la mesa «es fuerte» y va a poder «limar las diferencias», como el tema de los fijos discontinuos.
«Nuestra propuesta es una subida del 6% en 2023, del 5% en 2024 y del 4% en 2025 (en total el 15%). Además, ofrecemos la promoción automática de los trabajadores que están en las categorías de auxiliar y de ayudante, y una obligación de las empresas de hostelería de hacer paquetes de formación. Si no lo hace, el trabajador podría percibir en penalización 20 euros al mes en su nómina», ha indicado.
Preguntado por las diferencias con los sindicatos, el director general de Hostelería Madrid ha destacado que «el problema está en los fijos discontinuos a tiempo parcial, en el que se ha devenido toda la contratación eventual».
«Para poder contratar a los fijos discontinuos necesitamos pactarlo en el convenio tras la última reforma laboral. Hay que recordar la duración de los servicios es muy corta en el sector de catering y de eventos», ha explicado.
En esta línea, Blardony ha señalado que los sindicatos están pidiendo unos periodos de garantía para el trabajador de alrededor de 600 horas, es decir, 150 días de trabajo. «Es imposible poder asumir esto en actividades que son muy cortas porque Madrid no tiene una temporalidad muy marcada como las zonas de costa o sierra», ha apuntado.
Asimismo, ha recordado que la región tiene una actividad regular durante todo el año, «con muchísimos eventos». Por este motivo, la patronal espera que UGT y CC.OO. «entiendan que los empresarios tienen que adaptar a los fijos discontinuos a las necesidades y a la actividad que hay en Madrid».
Un periodo de mucha facturación
El director general de Hostelería Madrid ha recordado que la facturación en el periodo de Navidad es en torno a un 15% de la facturación de todo el año en la mayoría de los restaurantes. En esta línea, ha recalcado que para los empresarios y los trabajadores es «un momento muy importante de trabajo».
«Ya hemos pasado la parte de las comidas y cenas de empresa, pero sí que es verdad que continúan viniendo comidas familiares, de amigos y luego vendrá el cotillón. Si hubiese una gran repercusión de la huelga, nos haría daño, pero está por ver que eso se produzca», ha asegurado.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.