Los detenidos, puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente, cuentan con un amplio historial delictivo de diversa tipología, además de tener uno de ellos tres reclamaciones judiciales en vigor.
La Policía Nacional inició la investigación de este crimen tras la aparición de una víctima, que presentaba evidentes signos de violencia y parada cardiorrespiratoria, en el aparcamiento del Hospital de Valme.
La víctima, que fue previamente introducida a la fuerza en un vehículo mientras se encontraba en el aparcamiento del centro hospitalario, fue aproximadamente una hora después arrojada en el mismo lugar desde el interior del vehículo en el que había sido capturado de manera forzosa.
Ante tales hechos, los agentes iniciaron una compleja investigación, que tras más de siete meses en los que se practicaron numerosas gestiones y pesquisas tendentes al esclarecimiento de los hechos e identificación de los autores, ha permitido la detención de los mismos.
Fruto de esta investigación, se ha localizado una casa de campo en el término municipal de Utrera donde el fallecido estuvo retenido y donde se realizó junto con agentes de Policía Científica una inspección ocular para la localización de vestigios e indicios biológicos.
A día de hoy la investigación continúa abierta, no descartándose más detenciones, teniendo en cuenta que todos los indicios apuntan a que el móvil del crimen, es consecuencia de un ajuste de cuentas por el control de la venta de sustancias estupefacientes, en los que están implicados varios clanes familiares de distinta nacionalidad.
Una vez finalizadas las diligencias policiales tras la detención de los presuntos autores, estos han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente.
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