Así lo ha venido a trasladar la actual senadora socialista por designación autonómica en declaraciones en el programa de Cuatro Televisión en el que colabora --'Todo es mentira'--, recogidas por Europa Press, donde ha comentado que, «para el horizonte que tiene el PSOE andaluz por delante, tiene que ser acogedor con todo el mundo, tenga la sensibilidad que tenga», y «hace falta que todo el mundo se sienta cómodo ahí».
La también expresidenta de la Junta se ha pronunciado así al hilo de informaciones de las últimas fechas sobre dimisiones del partido en agrupaciones de provincias como Sevilla y Málaga, y ha señalado que cuando ve el partido «así» le «duele», porque «no me gusta abrir el periódico y ver esas cosas», y el PSOE es su «casa» y ella es de ese partido «hasta las trancas».
Dicho esto, Susana Díaz ha señalado que los «últimos momentos» suyos como secretaria general del PSOE-A «fueron muy duros». «Me sacaron por una ventana» y «lo pasé muy mal, tardé en recuperarme», ha relatado la expresidenta, quien ha incidido en la idea de que, «para lo que viene por delante, si queremos levantar cabeza» en Andalucía, «el PSOE tiene que ser acogedor y abrir las puertas a mucha gente de mucha sensibilidad que en estos momentos no se sienten parte» del proyecto y que «tiene mucho que aportar en Andalucía», donde «tenemos que volver a levantar el vuelo», ha remachado.
Tras recordar que fue ocho años secretaria general del PSOE andaluz y seis años presidenta de la Junta, Susana Díaz ha comentado que tiene que ser «respetuosa» con la dirección de su partido, porque con «cualquier otra cosa» que diga «va a parecer que hay un ánimo de revancha, de que no he superado» aquella salida de la Secretaría General del PSOE andaluz, en la que fue relevada por Juan Espadas tras perder las primarias en las que ambos se enfrentaron en el año 2021 para ser el cabeza de cartel en las elecciones autonómicas andaluzas que se acabaron celebrando en 2022.
Al respecto, la exdirigente socialista andaluza ha comentado que «en lo personal» ha «superado aquello» y «esa pantalla sí la pasé», aunque tardó tiempo y lo pasó «fatal», según ha comentado antes de aclarar que «del PSOE no me jubilo», de modo que sigue en el partido y cree que tiene «mucho que aportar».
Y eso tras haberse ido a Madrid «pasándolo fatal», según ha abundado Susana Díaz, que ha lamentado que en aquellos momentos había gente que no se acercaba a ella «no fuera a ser que cayera en desgracia» si la veían con ella, si bien ha defendido que «uno tiene que saber irse de los sitios», y ella cree que ha sabido «cerrar muy bien la puerta» de aquella etapa, según ha zanjado.
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