El Sindicato Médico Andaluz (SMA) en Sevilla ha informado este domingo de una nueva agresión a sanitarios del centro de salud de Nuestra Señora de la Paz, en la localidad sevillana de San Juan de Aznalfarache, por parte de un paciente que acudió al ambulatorio por un «intenso dolor de muelas». En este mismo centro, el pasado mes de julio, el SMA alertó de tres agresiones y, posteriormente, de una cuarta por una persona reincidente.
Fuentes de la Consejería de Salud y Consumo han confirmado la incidencia y han expresado a Europa Press su condena a cualquier tipo de agresión tanto física como verbal, dentro o fuera de un centro sanitario. Desde el centro se han activado los protocolos pertinentes. El Plan de Prevención y Atención de agresiones para los profesionales de sistema sanitario público andaluz activado incluye tanto asistencia jurídica como apoyo psicológico para los profesionales agredidos. Al mismo tiempo, siguiendo los protocolos establecidos, se ha formulado la correspondiente denuncia.
El incidente de este pasado sábado se produjo a la 1,20 de la madrugada cuando un paciente que alegaba un «intenso dolor se muelas» se encaró con una enfermera, la celadora y la médico de guardia, a las que llegó a amenazar con mensajes como «te voy a reventar la cabeza», «dándose cabezados, gritando y no aceptando el tratamiento propuesto a base de analgésicos», según el relato de las víctimas recogido por el sindicato en una nota de prensa.
El paciente reclamaba ser tratado con Tranxilium, tratamiento que, según él mismo, «le puso el mongolo del médico de la madrugada anterior», en relación a otro profesional que le trató de la misma dolencia el sábado por la noche. Ante la negativa de la médico de guardia, la enfermera y la celadora de ceder a sus «presiones», «la actitud agresiva y amenazante del paciente y su acompañante fue a más, obligando a las tres profesionales a refugiarse detrás del mostrador para evitar ser agredidas».
Pasado unos minutos, el paciente y la acompañante abandonaron el centro de salud, aunque «instantes después regresaron e intentaron volver a entrar a la fuerza, golpeando el cristal de la entrada en repetidas ocasiones mientras ambos proferían numerosos insultos y amenazas del tipo »Te voy a reventar la cabeza". Sólo la presencia de tres patrullas de la Policía Nacional logró acabar con el conflicto.
«Una vez más la carencia de personal de seguridad en el centro de salud genera una situación de riesgo manifiesto para los sanitarios durante el ejercicio de su función, por lo que desde el SMA reiteramos la necesidad de establecer las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los profesionales», ha señalado el sindicato, que ha reclamado botones del pánico en consultas, cámaras de grabación y vigilantes de seguridad.
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