Técnicos del Servicio de Vías y Obras de la Diputación Provincial de Teruel trabajan desde este pasado viernes en la limpieza de diferentes vías de la provincia que se han visto afectadas por las fuertes tormentas caídas en las últimas horas y que han provocado diversas incidencias por inundaciones y el barro acumulado, como en el caso del tramo que conecta la localidad de Blancas con la N-211.
Este pasado viernes a la noche el personal de la DPT procedió a realizar las primeras labores de limpieza en varios tramos entre Blancas y la N-211, la pista entre Blancas y Odón y la carretera de Odón a Bello --TE-V-4307--.
La fuerza del agua llegó a acumular una lámina de agua de hasta 70 70 centímetros en estas vías que impidió la circulación, lo que imposibilitó la comunicación entre las localidades vecinas Blancas y Odón.
Tras los trabajos del personal de la DPT y el propio descenso del nivel del agua, la circulación con prudencia se pudo reestablecer sobre las 23.00 horas.
Las labores de retirada de barro y tierra continúan este sábado desde primera hora con el fin de facilitar la circulación por estas vías, que permanecen abiertas, pero en las que se insta a una conducción prudente.
Por otro lado, los bomberos de la DPT también atendieron este viernes varios avisos relacionados con las tormentas. A Oliete acudieron para ayudar a una persona a cruzar el río, ya que la crecida le había dejado en el otro margen.
A Albalate del Arzobispo se desplazaron los bomberos de la DPT a una nave en la que entraba agua y este sábado está previsto que colaboren achicando más agua.
También recibieron un aviso en Luco de Jiloca de una persona con movilidad reducida que temía que entrara el agua en su casa, por lo que se trasladaron hasta allí para ayudarle a salir.
Además, los bomberos también trabajaron este viernes en la N-232 en Azaila colaborando con el personal de carreteras estatales en la limpieza de la vía.
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