Según ha informado la Guardia Civil en Bizkaia en un comunicado, la Benemérita, responsable del control de armas y explosivos, cartuchería y artículos pirotécnicos, desarrolla inspecciones habitualmente, con el fin de controlar la circulación, almacenamiento, comercio, adquisición, enajenación, tenencia y uso de los explosivos, cartuchería y pirotecnia.
En una de ellas, a mediados del mes de agosto de este año, agentes de la Guardia Civiles inspeccionaron un local comercial situado en la localidad vizcaína de Bermeo, en el que se localizaron más de 10 kilos de bengalas de uso en la marina almacenadas en un armario.
Tras comprobar que estaban caducadas, se solicitó al gerente de la empresa la documentación obligatoria para su comercialización, pero no acreditó autorización alguna para la tenencia y venta de estos artículos pirotécnicos e informó a los agentes de que había iniciado los trámites hace años para su concesión, pero que la tenía concedida, según han indicado.
El gerente relevó, a su vez, que suministraba las bengalas bajo pedido de clientes y los guardias civiles le comunicaron la forma de proceder para tramitar la solicitud de venta de este tipo de artículos pirotécnicos, a través de Delegación del Gobierno en el País Vasco.
Los agentes le solicitaron igualmente el libro-registro donde estuvieran anotadas las ventas o entregas de las bengalas, pero el gerente manifestó que no disponía de ese libro y que solamente se emitían facturas del proveedor del material al cliente.
Almacenaje sin autorización
Ante estos hechos, los guardias civiles intervinieron las bengalas y levantaron un acta de infracción por almacenar y comercializar artículos de uso en la marina sin autorización.
La Guardia Civil ha informado de que las bengalas se emplean en barcos y botes salvavidas y han indicado que emiten un denso humo naranja visible desde embarcaciones a varios kilómetros de distancia, lo que proporciona una gran visibilidad a los medios de salvamento y rescate.
No obstante, ha alertado de que contienen metales y productos químicos tóxicos por lo que pueden representar una amenaza para el medio ambiente y la salud humado.
Por ello han indicado que deben ser almacenadas y transportadas con cuidado y manipuladas con extrema precaución y únicamente para caso de emergencia.
Se recomienda igualmente verificar la fecha de caducidad antes de su uso, ya que pueden causar incendios o lesiones corporales y retirarlas en lugares habilitados ya que son altamente contaminantes.
La Guardia Civil ha informado de que existe el número de teléfono 062, así como el servicio de alertas gratuito para móviles app AlertCops, a disposición de quien desee facilitar cualquier información o bien colaborar en el ámbito de prevención del contrabando y otros ilícitos penales, delitos tecnológicos o medio ambiental entre otros, información que será tratada de manera «discreta y anónima», han garantizado.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.