El consejero de Turismo y Andalucía Exterior, Arturo Bernal, ha señalado la apuesta de Andalucía por convertirse en referente en dotar a las empresas y administraciones locales de las herramientas necesarias para aplicar la inteligencia de negocio y la gestión de datos al turismo para lograr así una promoción eficiente del destino.
Bernal, en una entrevista con Europa Press, ha aseverado que «no es lo mismo hacer promoción pensando en un turismo de masas que transformar ese modelo en uno cualitativo, donde podemos hacer una promoción concreta dirigida a poblaciones concretas en momentos del año determinados».
Con esta nueva estrategia, el titular de Turismo ha señalado que el Gobierno andaluz está consiguiendo «éxitos» como «esponjar el flujo e turistas a otros momentos del año», recalcando que «los crecimientos más importantes se están produciendo en el primer y el tercer cuatrimestre del año, periodos donde teníamos las mayores dificultades», puesto que «Andalucía tenía un modelo estacional que concentraba todo el turismo en el periodo estival».
Con la acción inteligente, ha proseguido el consejero andaluz, «obtenemos una promoción casi quirúrgica que nos permite actuar en mercados concretos, que nos interesan desde el punto de vista de la estancia, el gasto y también la compatibilidad en cuanto a la sensibilidad cultural y con el territorio que visita, evitando así que las ciudades se conviertan en parques temáticos».
Arturo Bernal ha hecho especial hincapié en que la inteligencia de datos «permite enfocarnos en públicos concretos». Así, ha puesto el ejemplo de la generación Z, «que busca cosas muy diferentes a las generaciones anteriores».
«Nuestra reconocida campaña de Andalusian Crush estaba muy enfocada a este público que tiene entre 20 y 30 años y que tiene una forma de comunicarse, de buscar la información muy diferentes», ha subrayado, al tiempo que ha resaltado que es «un éxito impactar en una generación compuesta por los que van a ser los consumidores de los próximos 35-40 años».
Estrategia de sostenibilidad
Bernal también ha hecho referencia al Plan General del Turismo Sostenible de Andalucía META 2027, «nuestro documento de referencia» que contempla las directrices del sector en Andalucía para los próximos años. Así, ha señalado que este plan ha tenido modificaciones para incluir elementos, ya que el desarrollo de la industria turística «es vital y tiene muchas incorporaciones», siendo la más reciente «la visión de la sostenibilidad social, en la que todos los países del mundo nos habíamos quedado atrás al centrarnos en vincular la sostenibilidad al medio ambiente y el apartado económico».
Sobre el sector turístico en particular, Bernal ha mostrado su apuesta por «un turismo fuerte y sostenible, que genere oportunidades de empleo y riqueza, pero que sea compatible con la comunidad local, generando el menor número de inconvenientes».
Además, ha vinculado la inteligencia de negocios y la gestión de datos con esta estrategia del Ejecutivo autonómico, puesto que «todo redunda en un turismo sostenible y responsable». «Tenemos que dejar esta industria en las mejores condiciones en términos de sostenibilidad económica, medioambiental y social con la ayuda de la información que nos da el mercado», ha apostillado.
Ayudas a la sequía
En este punto, Bernal se ha referido a las ayudas del Gobierno andaluz al sector turístico para paliar los efectos de la sequía, una subvención «inédita» y «alineada» con los grandes retos que presenta el cambio climático y la «complejidad» de la sequía que sufre la región.
En esta línea, ha puesto de relieve que la convocatoria se lanzó el 15 de agosto y en el plazo de un mes se recibieron 119 solicitudes por 20 millones, «todo un éxito». El Ejecutivo autonómico ha ampliado estas ayudas hasta los 40 millones con un plazo para solicitarlas que termina el 1 de octubre. Así, ha destacado que el sector turístico «muestra sensibilidad» ante cuestiones como la reducción del consumo de agua para paliar la sequía.
Además, el consejero ha anunciado que «dentro de muy poco» saldrá una nueva edición de las subvenciones de patrimonio cultural que incorporarán diez millones destinados a actuaciones que pretendan el mantenimiento del patrimonio cultural ligado a la actividad turística, un ejemplo de «la importancia que para el sector tiene la cultura, el medio ambiente y la sostenibilidad social».
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