Archivo - Fachada del Hospital La Ribera | CSIF - Archivo

TW
0

La Conselleria de Sanidad ha reorganizado los itinerarios clínicos de los servicios de Cirugía Cardiovascular del Sistema Valenciano de Salud por motivos «meramente técnicos» para «garantizar índices óptimos de calidad asistencial» de modo que el Hospital de La Ribera derivará las intervenciones de esta especialidad de alta complejidad al General de Valencia.

No obstante, el hospital de La Ribera mantendrá su servicio para los procesos diagnósticos y seguimiento de pacientes, así como el resto de especialidades del área cardíaca, es decir, cardiología y hemodinámica, «garantizando así la organización de la atención al código infarto, como en el resto de hospitales del Sistema Valenciano de Salud», según ha informado la Generalitat en un comunicado.

Sanidad concentrará así la atención a enfermedades de alta complejidad en unidades de referencia de máxima especialización para «garantizar los mejores resultados clínicos y optimizar los niveles de éxito en esta tipología de prestación asistencial».

En este sentido, la Conselleria ha reorganizado los itinerarios clínicos de los servicios de Cirugía Cardiovascular del Sistema Valenciano de Salud para «adecuarlos a los estándares de calidad, equidad asistencial y reducción de la morbimortalidad avalados por la comunidad científica nacional e internacional».

Para trabajar en este objetivo, las secretarías autonómicas de Planificación, Información y Transformación digital y de Sanidad han mantenido sucesivas reuniones conjuntas con los jefes de servicio de cada una de las especialidades de alta complejidad de los hospitales de referencia, cuya «aportación y consenso en la organización es clave para garantizar la mayor calidad y equidad en la prestación asistencial de máxima complejidad a los pacientes que la requieran», según las mismas fuentes.

Así, han señalado que la redistribución de la Cirugía Cardiaca en la Comunitat Valenciana se ha realizado en virtud a «criterios meramente técnicos». En este sentido, se ha constituido una Comisión formada por la Subdirección General de Política Sanitaria de la Conselleria y los jefes de Servicio de Cirugía Cardiaca de los seis hospitales de la Comunitat Valenciana que, en este momento, ofrecen este servicio.

Estos profesionales representan «los máximos exponentes» del conocimiento científico de cada una de las especialidades y son clave en la ayuda a la toma de decisiones. Así, la reorganización de itinerarios clínicos de los Servicios de Cirugía Cardiovascular ha sido consensuada con los jefes de Servicio de Cirugía cardíaca del Hospital Clínico, La Fe, y Hospital General de Valencia, así como del Hospital del Vinalopó y del Doctor Balmis de Alicante.

Cirugía cardiovascular en cinco hospitales

Según la reorganización de itinerarios consensuada, se concentra la atención de cirugía cardiovascular en los servicios de estos cinco hospitales, como hasta ahora, y el Hospital de La Ribera derivará las intervenciones de esta especialidad de alta complejidad a los Hospitales La Fe, Clínico y General de Valencia.

El criterio seguido ha sido la concentración de la actividad asistencial de alta complejidad según la ratio recomendada por la Sociedad Española de Cirugía cardiovascular y Endovascular (SECCE) y la Asociación Europea de cirugía Cardiotorácica (EACTS) de al menos 600 cirugías mayores con ingreso anuales, que «cumplen los hospitales indicados, a excepción del Hospital de La Ribera, con un volumen de cirugías realizadas inferior a 300 en el pasado año», según consta en los sistemas de información hospitalaria de Conselleria.

Además, esta reorganización «se alinea» con la recomendación del Sistema Nacional de Salud de disponer de un servicio de Cirugía Cardiovascular por cada millón de habitantes, con «la única finalidad de garantizar una atención especializada de calidad, segura y con equidad, así como un bajo nivel de morbimortalidad», han destacado.

En este sentido, han recalcado que estos servicios tratan enfermedades que requieren para su adecuada atención técnicas, tecnologías y procedimientos preventivos, diagnósticos y terapéuticos, de «elevado nivel de especialización», para los que es «esencial la experiencia en su utilización, una experiencia que sólo es posible alcanzar y mantener a través de ciertos volúmenes de actividad, de casos atendidos».

«Se trata de patologías que requieren de la aplicación de tecnologías punteras e innovadoras para las que, atendiendo a su mayor efectividad y a los recursos disponibles, se precisa la concentración de un número mínimo de casos», según las mismas fuentes.

De ete modo, el objetivo de la Conselleria de Sanidad es «garantizar la equidad» en el acceso a una atención sanitaria de «calidad, segura y eficiente» a las personas con patologías que, por sus características, precisan de «cuidados de elevado nivel de especialización que requieren concentrar los casos a tratar en un número reducido de centros».

Al respecto, han señalado que «todas las comunidades y todos los países de nuestro entorno han optado por este modelo para mejorar el valor aportado a los ciudadanos para garantizar una atención altamente especializada de calidad, segura y con equidad».