El arquitecto austríaco Daniel Libeskind acudió ayer a la
colocación de la primera piedra del Studio Weil en el Port
d'Andratx, uno de sus últimos proyectos. El edificio será realizado
desde Mallorca por el también arquitecto mallorquín, Premi Ciutat
de Palma, Jaume Vidal Contestí.
En una fusión sin precedentes de arte y arquitectura, la artista
norteamericana Barbara Weil "afincada desde hace muchos años en la
localidad mallorquina" propuso a este arquitecto de renombre
mundial la realización de un espacio que sirviese al mismo tiempo
para pintar, exponer obra e incluso vivir. El solar, ubicado frente
al propio chalet de Weil (en la calle Sant Carles de la Mola),
servirá para emplazar un edificio «integrado en el paisaje y en el
entorno», en palabras del propio Daniel Libeskind. Gracias a esta
inicitiva privada, los mallorquines podrán disfrutar de un moderno
edificio de la más alta vanguardia, que será abierto al público por
la propia artista.
Libeskind se destapó ayer, antes de colocar la primera piedra de
la construcción, como un gran admirador de la filosofía de Ramon
Llull. Un autor del que ha leído prácticamente toda su obra y que
ha influido de forma decisiva en su concepción de la arquitectura.
«Para realizar el edificio he aplicado la teoría de los círculos
concéntricos de Llull. Según esta tesis, al establecer varios
círculos se van creando múltiples centros». Lejos de los conocidos
zigzags que ha popularidado en todo el mundo, Libeskind toma aquí
formas más armoniosas, de clara inspiración «sentimental», como
gusta decir Weil.
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