I.P.09/10/01 0:00
TW
0

El Teatro Negro de Praga llega al Auditòrium de Palma, después de 10 años sin visitar la Isla, con dos representaciones de «Alicia en el país de las maravillas», hoy y mañana a las 22.00 horas en la sala Magna. La formación, creada en 1961, interpreta una adaptación libre de una de las obras más emblemáticas de Lewis Carroll, que tiene como principales intérpretes a Marcela Divisova en el papel de Alicia y Bob Dufek como el conejo blanco. En total, serán 12 actores sobre el escenario.

«Desde que a mediados de los sesenta se decidieron por poner sobre los escenarios obras con argumento, la compañía, que se caracteriza por unir poesía, fantasía e imaginación, ha perdido la timidez», según el productor y gerente Pavel Hortek, quien dijo que después de Alicia se adaptó «Peter Pan» y está prevista una versión de «La cenicienta».

«Alicia» supuso para la compañía algunas dificultades, ya que, según explicó Hortek, es una obra basada en la palabra y nosotros no la utilizamos, sino que nos servimos de la música y la expresión corporal, por eso la mayoría de los integrantes de la compañía son bailarines; pero, por otra parte, tiene mucho que ver con nuestra forma de trabajar el elemento surrealista». La versión que se verá en Palma es una adaptación libre hecha por el fundador de Teatre Negre Jiri Srnec para la visión del trabajo de la compañía, conocida por ser la primera en utilizar la técnica de la cámara negra.

Esta forma de teatro consiste en un escenario de terciopelo negro y parte de los actores, vestidos con este tejido, se mueven en él creando una sensación de invisibilidad. En el caso de «Alicia», quitando a la protagonista, el resto de actores hacen papeles «visibles» e «invisibles» que les llevan a un promedio de 16 cambios de vestuario en las cerca de dos horas que dura la función. Venidos de Latinoamérica y con esta gira europea, celebran su 40 aniversario ante el público que les es más fiel, que es, según Hortek, «el más participativo, el que a nostros nos interesa, el que más responde a lo que el Teatro Negro representa, los que saben conservar la infancia».