18/11/01 0:00
TW
0
J.N. Las calaixeres que contienen las fichas lexicográficas con las que mossèn Alcover confeccionó el «Diccionari català-valencià-balear» serán trasladadas al Arxiu del Regne de Mallorca, juntamente con el material adquirido por el Govern. Entre éste se encuentra el Archivo Alcover"Moll y los fondos bibliográficos del canónigo manacorí, que incluye desde una gramática de Nebrija hasta diversos ejemplares de rondalles. El traslado de esta valiosa herencia, actualmente depositada en la Universitat de las Illes, está previsto que comience en 15 días. Según explicó Ricardo Urgell, director del Arxiu del Regne, para acoger este legado se han habilitado diversas salas, una de ellas exclusivamente para las calaixeres.

Por lo que se refiere a los tres millones de fichas que incluye, Urgell manifestó que se ha encargado un mueble metálico hecho a medida. Urgell explicó que «precisarán una importante restauración; no están en condiciones de mantener las fichas». «Todas las fichas, escritas sobre un papel muy fino y frágil, serán objeto de un diagnóstico una a una para saber el estado en el que se encuentran y actuar de acuerdo con las necesidades», señaló. Las labores de recuperación y conservación serán llevadas a cabo por el equipo de técnicos de restauración del Arxiu.

Una vez hecho todo este trabajo, cuya duración no se puede avanzar, las fichas del diccionario serán digitalizadas y colocadas en una base de datos informatizada para poder ser consultadas por los investigadores. Urgell añadió que la informatización se hará siguiendo los mismos sistemas que la Real Academia Española de la Lengua o el Institut d'Estudis Catalans. Para comenzar el traslado sólo se está pendiente de que llegue el nuevo mobiliario que ha de acoger el legado del filólogo. Con ello se cierra la polémica comenzada hace años sobre cuál había de ser la ubicación de las calaixeres.

Entre las posibilidades que, en principio, se habían barajado estaban Can Oleo y Can Salas. Así mismo, el pueblo natal del filólogo también las reclamó para instalarlas en un futuro museo. Igualmente, Inca había manifestado su voluntad de acogerlas en el museo de artes gráficas conjuntamente con la imprenta Alcover. Cuando se instalen en el Arxiu se hará una inauguración oficial de las instalaciones y luego se cerrarán para iniciar su recuperación.