«Todo lo que veía Miró tenía ojos, vida». Mireia Sintes tiene nueve
años. Está haciendo un sobretejido con elementos como cucharas,
cintas, algarrobas y piñas. «Dibujaba los cuadros pensando en la
vida animal y expresando todo lo que sentía a través de la
naturaleza». Mireia está acompañada por otros chicos que aprenden
el trabajo de Miró a través de las ideas y de las teorías del
pintor, una manera de desarrollar la vena artística de los más
pequeños. Se encuentran en la Fundació Pilar i Joan Miró que ayer
celebró Sant Joan con una jornada de puertas abiertas y diversas
actividades.
Talleres, juegos malabares y espectáculos de humor. Pequeños y
mayores recorrieron la fundación buscando nuevas aventuras. «Este
taller es mi propio homenaje a los tapices de Miró que
desaparecieron después del atentado a las Torres Gemelas», comenta
Adriana Straijer. La escenógrafa y escultora explica el taller
«Sobreteixims Miró», una manera de experimentar con las texturas y
los relieves. La base: «Los objetos de uso cotidiano que pueden
verse en el Taller Sert y que el artista empleaba», según Straijer.
La temática: «Los ojos y la mirada».
«No quiere hacer cosas de música, sólo cosas artísticas, por eso
la traigo, para que aprenda». Carme García es la madre de Mireia.
Cada año lleva a su hija a realizar los diferentes talleres, como
Margarita Aulí. «Me gusta traerlos para que desarrollen su
creatividad y para fomentar su cultura», asegura. Neus Francia, su
hija, está haciendo un grabado en el taller «Llibre d'artista».
«Primero pintamos y después imprimimos», comenta Neus. «Les
enseñamos a realizar un trabajo individual que forma parte de una
obra colectiva», dice Cecilia Segura, la encargada de la
actividad.
«¿Qué color tiene esta música?». Mercedes Estarellas explica
«Vine! Aturem el temps», un taller que busca acentuar las
sensaciones con el sonido, el color y el movimiento.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.