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J.N.
Hace dieciocho meses se cerró al público pendiente de ser restaurada después de una exposición del ibicenco Narcís Puget. Ayer, tras todo este periodo sin acoger ningún acontecimiento cultural y sin que Madrid haya realizado ninguna obra, sa Llonja de Palma volvió a abrir sus puertas al arte con la exposición «Pitiüses 59-02. Art Contemporani a Eivissa i Formentera». El montaje podrá verse hasta el próximo 12 de enero.

La muestra busca, a través de cincuenta artistas, ofrecer una perspectiva global de la evolución del último medio siglo de creación plástica de las dos islas menores del archipiélago. La exposición, que está comisariada por la directora del Museu d'Art Contemporani d'Eivissa, Elena Ruiz, tiene su punto de partida en los ocho fundadores del grupo Eivissa 59 y llega hasta el arte emergente que caracteriza el arte en la actualidad.

Nombres como los de Vicent Calbet, Toni Cardona, Will Faber, Wols, Walter Benjamin, Raoul Hausmann, Erwin Bronner, son, entre muchos otros, algunos de los artistas que forman parte de esta muestra que se articula a partir de otras colectivas menos ambiciosas realizadas en el Museu d'Eivissa.

Durante la presentación, el conseller de Cultura del Govern, Damià Pons, acompañado por el director general de Cultura, Pere Muñoz, y la comisaria, puso de manifiesto la importancia del trabajo de los artistas ibicencos de los sesenta afirmando que «la contemporaneidad de las Balears habla desde Eivissa», sobre todo durante los sesenta y setenta.