Una escenografía sencilla, negra, con alguna que otra planta. Un
piano de cola y la música de Sorozábal. Todos estos elementos se
unieron ayer en el Teatre Municipal de Palma en la Nit Lírica
dedicada al compositor vasco.
La zarzuela protagonizó la velada. La soprano Rosana Delgado, la
mezzosoprano Mónica Aguilera, el tenor Pedro Fuentes, el barítono
Gabriel Aguilera, el bajo Andreu Llamas y el pianista Andreu
Bennàssar se encargaron de interpretar algunas piezas de las obras
más conocidas de Sorozábal que, un Teatre Municipal lleno, acogió
con devoción. La respuesta del público fue tal que, más de uno, no
pudo entrar en el recinto.
La mezzosoprano fue la primera en subir al escenario. Vestida
con un traje morado y un chal blanco, Aguilera cantó «Noche
hermosa», incluida en «Katiuska». Después, Delgado y Gabriel
Aguilera interpretaron «Somos dos barcas» de la misma obra. «Adiós
a la bohemia» y «La del manojo de rosas» precedieron a la actuación
de Francisco Bosch, quien cantó «Calor de nido» en una colaboración
especial.
La Nit Lírica continuó con las obras «La taberna del puerto»,
«Black el payaso» y «Don Manolito», que cerró la velada. La noche
sirvió para recordar la figura de uno de los últimos grandes
compositores de zarzuela, que empezó su carrera en el Orfeón
Donostiarra y la continuó en Alemania en formaciones como la
Gradian Lleinweg Orchestra. También compuso música sinfónica,
lieder, corales y bandas sonoras para películas, entre otras
obras.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.