La propuesta viene después de la negativa del presidente de
Galicia, Manuel Fraga, a que la gala, prevista para el 5 de mayo,
se realice en Santiago por el temor a posibles críticas a la
política del Gobierno Aznar en el conflicto de Irak o en la gestión
del «Prestige».
«Después de lo que pasó en la gala de los Goya tenemos la
impresión de que en este momento hay cierta corriente en convertir
estos premios en lo que no son», señaló Fraga, añadiendo que «pagar
para que lo insulten a uno no lo hace más que un tonto». También
aludió motivos económicos relacionados con las consecuencias del
vertido de fuel.
Al igual que Balears, diferentes capitales del Estado como
Sevilla, que propone el teatro de la Maestranza, han propuesto
algunos espacios para la gala. Segundos se informó desde
Presidencia del Gobierno, la iniciativa de este ofrecimiento salió
«del entorno más próximo del president Antich» después de una
conversación con la Conselleria de Turisme. Ayer, las fuentes
consultadas de la Conselleria de Cultura no estaban informadas de
esta disposición del Govern que de momento no ha especificado dónde
se haría. La Asociación Balear de Empresas Productoras de Teatro
anunció que «los miembros del jurado del Premio Espectáculo
Revelación 2002 por parte de las Islas Baleares han acordado no
hacer pública su resolución hasta que la SGAE no retire de los
premios Max la convocatoria del premio al mejor autor en
valenciano, al considerar que atenta contra la unidad de la lengua
catalana».
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