Antònia Arbona (Sóller, 1970) ha configurado un mosaico humano
lleno de referencias artísticas y literarias en su último libro
«Territori d'encluses». El trabajo, una cuarentena de poemas,
demuestra la madurez de la autora en el uso de la metáfora, la
anáfora y la parábola.
Arbona homenajea con este nuevo poemario a autores mallorquines
como Bartomeu Fiol, Jaume Pomar, Miquel Bauçà y Miquel Àngel Riera,
sobre los que ya ha publicado otros trabajos. Pero también
aprovecha su último libro para realizar una crítica a la sociedad
literaria de la Isla «a través de referencias al antiguo testamento
y al mundo judío».
Sin embargo, Arbona no se ha conformado con eso e incluso ha
introducido referencias implícitas sobre otros autores como Arthur
Rimbaud o Fernando Pessoa. «He utilizado el desdoblamiento de la
voz poética, con una serie de alter egos que van apareciendo en el
libro, un recurso muy utilizado por estos dos autores», apuntó.
«Territori d'encluses» está compuesto por 41 poemas y tiene un
inicio ciertamente sorprendente. En una primera parte ha escrito, a
forma de introducción, cinco sonetos, algo poco habitual en los
poetas del siglo XXI, más habituados a una poesía libre y sin tanta
métrica.
La segunda parte consta de «versos amorosos, sobre todo,
líricos», indicó Arbona. A partir de ahí, según la autora, comienza
lo que denominó como «el corpus del libro». Después de más de 13
años publicando poemarios, Arbona puede presumir de haber editado
más de diez libros de esta temática. «Me va de fábula y en la
editorial estoy muy bien», explicó. Sin embargo, sigue siendo
realista: «Si alguien dice que vende muchos libros de poesía,
miente».
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