El fotógrafo Pep Bonet, en Amsterdam, ciudad en la que reside actualmente. Foto: CARLES DOMÈNEC

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C.DOMÈNEC|BARCELONA

El mallorquín Pep Bonet ha ganado la beca Eugene Smith en fotografía humanística, uno de los galardones más importantes. El premio tiene una dotación económica de 30.000 dólares que permitirán a Bonet continuar con su espléndido trabajo iniciado ya en Sierra Leona. Con la obtención de la beca Eugene Smith, Pep Bonet unirá su nombre a una lista de fotógrafos reputados internacionalmente. Sebastiao Salgado la ganó en 1982, Cristina García Rodero en 1989, James Nachtwey en 1993. La importancia del premio es su gran repercusión y la capacidad del ganador de trabajar de forma independiente en su proyecto personal.

La guerra civil en Sierra Leona causó miles de muertos, un gran número de secuestros, torturas, mutilados y un siniestro repertorio de formas de destrucción. Bonet fotografió la escuela Milton Margai en Freetown, para niños ciegos a causa de las torturas de los rebeldes, el maltrato a los pacientes de un hospital psiquiátrico y la liga de fútbol para amputados de guerra en Murray Town.

El país africano, tras años de inestabilidad política sin rumbo ni gobierno, aunque protegido por la ONU, empieza una nueva etapa sin la ayuda de las fuerzas internacionales y con un mandato democrático. La incógnita de si Sierra Leona podrá resistir la nueva era o sucumbirá definitivamente al poder extorsionador de las mafias locales es el núcleo de interés del trabajo actual de Pep Bonet. El fotógrafo ya ha viajado a Sierra Leona en varias ocasiones y ha fotografiado la barbarie a través de historias cotidianas.