TW
0

NURIA ABAD

La octava edición de Belenes para el Siglo XXI que organiza Can Marquès y que se podrá visitar en esta casa de la calle Zanglada hasta el próximo 8 de enero ha sido proyectado por Joana Vasconcelos (Paris, 1971), una de las más importantes escultoras portuguesas de la actualidad, bajo el título Familia feliz.

Dos imágenes de cemento de gran tamaño, una ninfa y el dios Baco, representan a la Vírgen y San José, que sujetan una hamaca en la que descansa el Niño Jesús. El uso de colores planos en las tres figuras se vislumbra a través de una segunda piel de ganchillo, que pone de relieve la dimensión kitsh y hedonista de los «productos vanales propios de la sociedad de lujo», según la artista.

Aunque parta de una descontextualización de este material de uso doméstico como es el ganchillo, su utilización es una respuesta desenfadada «al rigor de una tradición católica que hay que valorar», afirma desde su condición atea. Conjuga, así, la connexión entre lo popular y lo conceptual, lo que permite que el espectador aprecie la ironía que subyace en sin que se sienta ofendido.