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LAURA MOYÀ Joan Arrom, el nuevo director-gerente del Teatre Principal, tiene muy claro el papel que el recién reinaugurado espacio escénico palmesano tiene que cumplir a partir de septiembre: convertirse en el centro dramático de Mallorca y, por extensión, de Balears. Una tarea difícil de llevar a cabo porque necesitará que el presupuesto asignado permita cumplir con las expectativas. Aún así, el poner de nuevo en marcha toda la maquinaria del teatro supone ya de por sí todo un reto.

"¿Cuáles son sus prioridades más urgentes?
"Me gustaría poder dividir el cargo de director-gerente en dos figuras diferentes. El director artístico tiene una manera de hacer las cosas que le dificulta ser un buen gerente y, por otra parte, es difícil que un gestor tenga las cualidades de un buen director. Por eso creo que deben existir los dos cargos, ocupados por dos personas diferentes. También trabajamos en la creación de un plan de gestión que defina el modelo que debe seguir el nuevo Principal, es decir, que nos diga cómo funcionaría mejor.

"Existe el Pla Estratègic del Sector de les Arts Escèniques, que ofrece algunas pinceladas de los objetivos que el teatro debería tener. ¿Lo aplicarán?
"Mi programa incluye las ideas y las líneas de actuación que propone el estudio, entre ellas que el Principal se convierta en un centro dramático.
"¿El teatro se abrirá el 21 de septiembre de forma definitiva?
"El 21 de septiembre está programada la primera actuación teatral, Tales of the Body, de Au Ments, pero antes se habrán celebrado los actos de la Diada de Mallorca. Como teatro público, tenemos la obligación de ceder o establecer convenios con muchas entidades. Me gustaría que el Principal cogiera rápidamente una personalidad y un carácter propios, que pronto se viera qué actividades pueden desarrollarse y cuáles no. El teatro no será un almacén de cultura, tendrá una vocación clara de centro dramático que no podrá acoger cualquier cosa. Tampoco buscaremos convertirnos en la competencia del sector privado, pero, como ellos, querremos que mucha gente vaya al teatro. "¿Cuáles serán sus líneas de actuación a nivel teatral?
"Habrá cinco líneas de actuación. La primera se centrará en potenciar la dramaturgia contemporánea, tanto la autóctona como la universal, y, la segunda, en impulsar la nueva creación escénica. Queremos dar oportunidades a los nuevos autores y a los no tan nuevos, que las obras puedan gestarse desde el Principal y que, como final del proceso, se estrenen en el espacio escénico palmesano. La tercera línea de actuación será la de trabajar con los textos clásicos, tanto el repertorio universal como el local. Este último está bastante limitado, pero existe un teatro popular muy rico que puede actualizarse. La danza también tendrá su espacio, al igual que el teatro infantil y juvenil, muy importante si queremos encontrar al público del futuro.

"En definitiva, está claro que el teatro será el centro neurálgico de las artes escénicas en la Isla.
"Será un centro de creación y de exhibición, algo también necesario porque en Mallorca existe un déficit de espacios y el sector privado programa sólo el teatro que le interesa. Muchas obras que deberían pasar por aquí se quedan sin poder escenificarse, algo que no debe permitirse. Respecto a la creación, trabajaremos las producciones y las coproducciones y, sobre todo, buscaremos que los montajes puedan salir de gira. Para eso será muy importante establecer contactos con otros teatros.