Emma Penella y su esposo, Emiliano Piedra, con sus hijos de vacaciones en Mallorca.

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AGENCIAS/M.D. La actriz madrileña Emma Penella, que daba vida a la entrañable doña Concha de la televisión , reconocida y conocida por las nuevas generaciones al grito de: «!Váyase señor Cuesta, váyase!», falleció ayer en su domicilio a la 01.00 de la madrugada, a los 76 años de edad. La muerte fue consecuencia de una parada cardiorrespiratoria provocada por una septicemia producida por la diabetes que sufría hace años, según informó su hija mayor, Emma Piedra.

Emma Penella estuvo ligada a Mallorca, a donde acudía a veranear con su esposo, Emiliano Piedra, y sus hijos, cuando éstas eran pequeñas, en Formentor y en Pollença. Tras la muerte de su esposo también pasó algunas vacaciones en Palma con sus hijas y sus nietos. En 1998, en una entrevista con Ultima Hora en el hotel Son Vida, comentaba que pensaba retirarse del teatro, entonces representaba en Madrid Me gusta Schubert y poco podía imaginarse que la televisióbn la volvería a colocar en lo más alto de la popularidad. Aquel día de agosto, en el hotel Arabella, la actriz también confesó lo «enamoradísisma» que había estado siempre de su esposo, amor que permanecía en su interior a pesar de su fallecimiento.

Hermana de las también actrices Terele Pávez y Elisa Montes, formaba actualmente parte del reparto de la serie La que se avecina y había estado ingresada recientemente en para ser operada de la columna vertebral, pero hacía 10 días que había regresado a casa. Emma Penella será enterrada hoy en el cementerio de La Almudena, en Madrid, donde también reposan los restos de su marido, el productor cinematográfico Emiliano Piedra, que falleció el 28 de agosto de 1991, un día después que la actriz hace 16 años.

Aunque la popularidad le haya llegado en estos últimos años gracias a la televisión, la carrera de Emma Penella fue muy dilatada y está llega de grandes obras. Sus inicios se remontan al Teatro María Guerrero y con sólo 19 años dio el salto a la gran pantalla, dándose a conocer dentro del mundo del cine español de la década de los 50. Aunque el papel que le proporcionó mayores reconocimientos llegó en 1963 de la mano de Luis García Berlanga, de la mano de El verdugo, que se rodó en parte en Mallorca en lugares como las cuevas del Drac. Berlanga declaró ayer sentirse «muy apenado y triste» por la muerte de la actriz.

Emma Penella había participado en películas tan conocidas como Fortunata y Jacinta, de Angelino Fons, o La Regenta, de Gonzalo Suárez; pero, además, había trabajado junto a Carlos Saura en el film El amor brujo y Eloy de la Iglesia en La estanquera de Vallecas. Penella dedicó una parte importante de su carrera al teatro y fue esa voz «astillada y dramática» que la caracterizaba y que en sus comienzos algunos doblaban por no considerarla fonogénica, la que según Juan Antonio Bardem, con quien rodó Cómicos, era uno de sus mejores atributos
Su trabajo más reciente está ligado a la televisión, donde encarnaba el papel de Charo de la Vega (Concha) en la serie La que se avecina (emitida por Telecinco) y compartía reparto con Gemma Cuerva, Mariví Bilbao y Beatriz Carvajal entre otros. Esta última declaró que la muerte de Penella «es una pena muy grande para todos los compañeros de la meca del cine», y la calificó como «un pedazo de actriz con ganas siempre de trabajar». Por su parte, todo el quipo de la serie han declarado sentirse «muy afectados» porque «la abuela de la serie», como ellos la calificaban, «era pura vitalidad y una enamorada la vida».