No desperdiciaron la oportunidad. Los 'actores' que ayer interpretaron la clásica obra de Llorenç Moyà la Adoració dels tres Reis d'Orient no dudaron en soltar 'morcillas' criticando la gestión del PP en el Ajuntament de Inca. Como temas estrella, criticaron las obras del mercado cubierto y la rehabilitación del Teatre Principal.
Ya al inicio de la obra, el director, Joan Lacomba, avisó al numeroso público que llenó hasta los topes la iglesia de Santa Maria la Major de que estuvieran atentos «porque los actores dirán muchas cosas interesantes». Y así fue.
Los pastorcillos Nofre Munar y Ester Perelló aprovecharon su minuto de gloria para decir sus 'morcillas', que provocaron las carcajadas del público. Nofre Munar no dudó en pedir al niño Jesús que «vos que sou nat, teniu coneixement i arreglau lo del mercat». Ester Perelló, bajo el sonido de las castañetas, entonó: «Una dona embarassada anunciava l'hospital, i la filla serà casada en tenir el Principal».
Tomeu Martínez (criado de Baltasar) hizo alarde de su color de piel y aprovechó para recriminar «negre, negrot, en Matas mos ha deixat un bon mort!». A lo que le contestaron «alerta que no t'escolti na Rosa». Antoni Alorda (rey Herodes) también recordó la marcha del ex president justo antes de que el dimoni fuera a por él: «Me veig com en Matas fugint pel forat del moix».
El personaje del dimoni, interpretado por Antoni Llompart, tampoco desperdició su oportunidad y aseguró que «aquest mercat cobert pareix cosa del dimoni, però no us enganeu ha estat cosa de Sant Josep!».
Pere Rotger aguantó todas las críticas durante el transcurso de la obra entre bastidores, y a la hora de salir, los nervios le jugaron una mala pasada y se quedó en blanco hasta que Joana Melis (mestre de cerimònies) le dió el pie.
La obra terminó con la aparición de Àngel García (ángel) que pudo la guinda a la representación: «A la fi una obra està ben acabada a Inca...Aquesta!».
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