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EUROPA PRESS x MADRID José Bello Lasierra, más conocido como Pepín Bello, falleció ayer, mientras dormía en su domicilio madrileño, a los 103 años. Era considerado como miembro de la Generación del 27, aunque nunca escribió nada, ya que la historia literaria lo reconoce como el aglutinador del movimiento, siendo el inspirador de muchas de las obras de sus compañeros. Esta importante presencia de Bello en los años veinte le ha supuesto un gran reconocimiento entre sus compañeros de profesión y el mundo de la cultura en general. «Perdemos a la que ha sido la memoria viva de una época de fructífera creación», señaló el Ministro de Cultura, César Antonio Molina.

El mundo de las letras llora hoy la muerte del último superviviente de la Generación del 27, que falleció por un paro cardíaco. Con más de cien años, Bello mantenía «en su sitio la cabeza» según explica su sobrina Ana Rosa, y «gozaba de buena salud», aunque la vejez había «agotado su organismo», señaló. Hoy será enterrado en el cementerio de La Almudena.

Oscense, nacido en 1904, Bello desempeñó un papel crucial como aglutinador del grupo de artistas que durante la década de los veinte se reunió en la Residencia de Estudiantes, y en el que forjaron su amistad personalidades del mundo artístico como Buñuel, Dalí o Lorca, con quien el fallecido compartió habitación en su juventud.

«No quiso nunca figurar y fue muy amigo de sus amigos», apuntó la directora de la residencia, Alicia Gómez Navarro, quien recordó que él siempre contaba que había sido autor de muchas imágenes surrealistas como Un perro andaluz, a cuyo guión aportó numerosas imágenes «que luego hicieron otros», subrayó. Tampoco escatimó en elogios el director de la Real Academia Española (RAE), Víctor García de la Concha, que definió a Pepín como «una figura absolutamente relevante de aquel grupo de amigos que contribuyeron a lo que ellos llamaban la joven literatura». Carmen Caffarel, directora del Instituto Cervantes, destacó que con él se pierde «al amigo de todos» y le calificó como «hombre generoso que tanto ayudó a los miembros de su generación con imaginación, talento y humildad».