Jordania presentó oficialmente ayer en la The Jordan National Gallery of Fine Arts de Ammán la exposición itinerante Cerámicas de Picasso, procedente de colecciones mallorquinas. La inauguración de estas obras del artista malagueño estuvo presidida por la Princesa Ghida Talal.
Las cerámicas, que permanecerán expuestas en Jordania hasta mediados del mes de julio, pertenecen a la Col·lecció d'Art Serra, al Museu Es Baluard y a la Sala Picasso del Ferrocarril de Sóller. La muestra fue presentada en Amman por la princesa Wishdán Ali, presidenta de la Real Sociedad de Bellas Artes; el embajador de España, Manuel Lorenzo; el director de Cultura del Instituto Cervantes, Rufino Sánchez; el director del Instituto Cervantes de Ammán, Carlos Varona; el director de la galería Nacional, Khalid Khreis, y la comisaria de Cerámicas de Picasso, Dolores Durán, quien ha realizado una «rigurosa selección de obras con el objetivo de ofrecer al espectador una visión de conjunto, muy significativa, de la intensa y multidisciplinar labor de Picasso como creador». Así, a través de esta exposición, se corrobora que para Picasso no existieron barreras a la hora de trasladar su arte a cualquier faceta de su vida o a cualquier disciplina.
La exposición, organizada por el Instituto Cervantes y The Royal Gallery of Fine Arts de Jordania, reúne treinta piezas datadas entre 1947 y 1969, además de grabados a buril que ilustran el libro Carmen, con texto de Prosper Merimée (1949), y una selección de libros ilustrados también por el artista malagueño.
La temática que Picasso plasma en las piezas de esta muestra es la misma que en el resto de su producción. Pueden verse rostros femeninos, tauromaquias, naturalezas muertas o animales en esta selección en la que queda patente cómo Picasso quiso tratar la cerámica como otro soporte más en el que expresar su arte.
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