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HUMPHREY CARTER

El intérprete y cantautor Mick Hucknall y su legendaria banda, Simply Red, actuarán el próximo 3 de agosto en la plaza de toros de Palma, donde posiblemente ofrezcan el que será su primer y último concierto en Balears. Después de más de veinte años al frente de Simply Red, Hucknall disolverá la formación en 2010 para dedicarse a sus proyectos en solitario.

Antes de su despedida oficial, Simply Red hará revivir al público cientos de recuerdos con canciones como Money's too tight to mention, Holding back the years, If you don't know me by now, Stars o Something got me started, grandes éxitos que forman parte de la banda sonora de los años ochenta. De hecho, Hucknall es el primero que sigue emocionándose con su repertorio. «Me encanta tocar nuestros grandes éxitos en directo y que el público los coree con nosotros», explica el líder de la banda, quien tampoco oculta que «Simply Red ha sido una parte muy importante de mi vida y me ha hecho ser quien soy».

La pasión de Hucknall por cantar y componer no se ha marchitado como lo han hecho su apoyo al Partido Laborista británico o su interés por la política. «Yo apoyé al Partido Laborista y estuve muy implicado», explica, confesando que «aunque me gusta pensar que he contribuido a que volvieran al poder, ahora ya no tengo más interés en la política, solamente quiero concentrarme en la música».

Al margen de su antiguo y personal activismo, el cantautor cree que aquel espíritu comprometido también se transfirió a su banda. «Thatcher estaba al mando de Gran Bretaña y había un montón de cosas que iban mal, así que cuando empezamos a tocar con Simply Red incluimos un montón de mensajes sociales en nuestras canciones», recuerda. Sin embargo, para Hucknall esa faceta de la banda pasó más bien inadvertida. «Teníamos un mensaje y canciones protesta, pero, al no tener un look hippy, no nos tomaron en serio», añade.

Volviendo a la música en su sentido más estricto, que es en realidad lo que ahora ocupa a Hucknall, el cantautor acaba de lanzar su primer trabajo en solitario, Tribute to Bobby. En él, el líder de Simply Red apuesta por el rhythm and blues para homenajear a uno de sus héroes musicales, Bobby Blue Bland, quien, a pesar de sus ochenta años y más de treinta éxitos a sus espaldas, sigue siendo una de las leyendas menos conocidas del blues. «He estado escuchándole desde que tenía 18 años y todavía disfruto su música, aunque un montón de gente no le conozca, ni su música suene como uno suele imaginarse que suena el blues», explica el artista sobre su nuevo proyecto paralelo.

Como el propio Hucknall indica, «la mayoría de álbumes de tributo se graban cuando un artista está muerto, pero Bobby todavía está muy vivo, a pesar de que no aparezca en el disco». El homenajeado, sin embargo, ya se ha pronunciado al respecto calificando el disco de «muy bueno», una opinión que también comparte el célebre músico B.B. King.

Con Tribute to Bobby, Hucknall se acerca a ese sonido «más físico y terrenal acompañado de rock and roll y gospel», que caracterizaba al blues de los años 50 y 60. «Quiero ser con ese ritmo capaz de hacer que chasques tus dedos o muevas tu cuerpo sin darte cuenta», explica el artista, quien al mismo tiempo quiere alejarse del «retro blues y canciones de jazz que triunfan en las listas de éxito para poner mi propio sello en el blues de los años 50 y 60».

Su mirada al pasado se produce, en gran parte, por su decepción ante la actual escena musical «sosa, repetitiva y donde todos los grupos suenan igual y sin que se produzca nada verdaderamente excitante». ¿Acaso nadie se salva de la quema? Sí, Mick Hucknall da «gracias a Dios por Amy Winehouse».

Concierto de Simply Red. Plaza de toros de Palma. 3 de agosto, a las 20.00 horas. Entradas a 48, 55 y 125 euros.