Joan Miquel Oliver, ayer en Barcelona. g Foto: C.DOMENEC

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C. DOMÈNEC x BARCELONA  Joan Miquel Oliver publica en solitario, sin Antònia Font, el disco Bombón mallorquín que aparece con el libro titulado Quadern 2008 (Editorial Empúries) de los apuntes de trabajo del autor con «dibujos, guiones de cine, apuntes de una futura novela». La presentación en Mallorca de las doce nuevas canciones se hará en el Teatre Xesc Forteza de Palma el 8 de mayo. Ayer lo explicó a los medios en Barcelona en una amplia ronda de entrevistas.

"¿Qué representa para usted un bombón mallorquín?
"Cuando era pequeño y pedía un helado, mis padres me daban un polo, pero veía como las señoras se comían un bombón mallorquín, que es un helado noble. Es extraño pero es un helado que no ha salido de Mallorca. No se encuentra ni en Menorca, que es donde se fabricaba. Un bombón mallorquín es el símbolo de la poca autoestima de los mallorquines y de un cierto complejo de hermano pequeño.

"El disco es muy íntimo, ¿plasma una intimidad recreada o es su propia vida?
"La intimidad, al escribir, siempre tiene una parte inventada, pero ha de ser verosímil. Tendría que mirar el disco línea por línea para comentar lo que es autobiográfico y lo que no lo es.

"¿Cómo definiría este trabajo en relación a su contexto musical?
"Es un disco donde he puesto toda mi fuerza. A veces piensas que no le va bien a un libro o a un disco ponerle todo. En cambio, en éste he querido hacer un disco con lo mejor que tenía y, si era necesario, grabando cincuenta versiones de una canción. A partir de ahora siempre lo haré así.

"¿Se ha rodado algún videoclip con alguna canción del disco?
"Sí, ya se ha hecho con Final feliç, que es la canción más sencilla y fácil. No es un disco fácil de escuchar. Tiene mucho material, con muchas melodías y significados diversos. Es para alguien que quiera entretenerse escuchándolo. Final feliç es una carta de presentación más estándar.

"A nivel de producción, ¿cómo ha trabajado?
"Yo lo he querido hacer todo y, además, en mi casa. Escribo, pongo los micrófonos, he tocado todos los instrumentos que he podido y las colaboraciones son muy concretas. Es un disco muy en solitario y la incorporación de una voz femenina me gusta mucho. Ahora la gente escucha los discos con Ipod y puede dar claustrofobia tener pegado a la oreja durante mucho tiempo a un hombre. Es una forma de desahogar.

"¿Qué escribe primero, las letras o la música?
"La letra es lo más importante. La música es un lenguaje abstracto. A nivel musical este disco es un poco rarito y a nadie le extraña. No tiene un formato convencional, pero no pasa nada si vas entendiendo la letra y su mensaje. Por eso empiezo siempre con la letra.

"¿Por qué le ha salido tan variado en estilos?
"He querido que fuera complicado. Cuando una canción es buena, lo es sin tener en cuenta el estilo. Y si es mala, no hay nada que hacer. Está lleno de melodías, cambios de tono, juegos e ideas musicales. Procuraré que, como este disco es más complicado, en los directos no pierda. Yo confío más en mi repertorio que en mi presencia. Me veo obligado a tener que cuidar un poco más la parte técnica. La gente no se entretiene demasiado en escuchar los discos y los músicos ya lo sabemos. En este disco no he sufrido tanto por estas cosas. ¡Que lo escuchen esta vez!