David Carreras posa con la estatuilla del festival. Foto: TERESA AYUGA

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MARIANA DÍAZ

«La gente de la industria cinematográfica necesita escaparates para comprar y vender películas y un festival entre abril y mayo es un momento perfecto porque se sitúa entre la Berlinale y el Festival de Cannes», es decir, de febrero a mayo, meses que coinciden con la temporada turística baja. Sobre estos conceptos ha trabajado el director de cine David Carreras para dar forma al Mallorca International Film Festival (MAIFF), un proyecto que ha concebido, también, como un gran evento que serviría para ayudar a la desestacionalización. Carreras ya ha comenzado a buscar apoyos en la Administración y la empresa privada con una fecha para arrancar con la primera edición, 2011. El Palacio de Congresos y el Teatro Principal serían los escenarios principales.

Carreras, cuya película Flores negras obtuvo un premio en el pasado Festival de Cine Español de Málaga, señala que cuenta con apoyo de «Turisme del Govern, del Consell, de asociaciones hoteleras y de otros inversores privados, que van desde empresas de transporte hasta de cosmética».

Según este cineasta catalán afincado en Sóller, «todo el mundo está reaccionando muy bien a la idea». El festival se ha presupuestado «en siete millones de euros por edición y será autofinanciable a partir de 2015». Por ley, el Estado, a través del Ministerio de Cultura, no podrá participar hasta la segunda edición.

Antoni Oliver, director gerente del Institut d'Estratègia Turística (INESTUR), dependiente de la Conselleria de Turisme, confirmó ayer el «interés» del Govern en el proyecto, pero añadió que los servicios jurídicos «están estudiando la viabilidad de esta colaboración», ya que el festival implica a entidades públicas y privadas y una aportación económica importante. Porque si bien comenzaría a rodar en 2011, 2010 será el año de darlo a conocer en Europa, Norteamérica o Asia, en otros festivales de cine de Cannes a Toronto, de Berlín a San Sebastián o Tokio, y en ferias turísticas como la World Trade Market, entre otras.

Estas acciones de divulgación supondrán, según Carreras, «una gran promoción para Mallorca» porque está previsto «una gran campaña de publicidad con varios actores internacionales que la vendrán a rodar a Mallorca».

¿En qué momento se encuentran las negociaciones con los patrocinadores? «En el de firmar contratos de patrocinio, pero vamos con calma para evitar problemas y abusos».

Cuando se pregunta al director cómo ha puesto en marcha una proyecto de tal envergadura en tiempos de crisis, contesta: «En momentos como éste puedes esconderte dentro de la concha o tira adelante con los proyectos, éste festival puede dar trabajo a mucha gente, tanto directa como indirectamente, porque hablamos de adelantar la temporada turística». Pero también es consciente que «no se puede hacer sin ilusión», además de dinero. Respecto a éste, calcula el «impacto directo del festival en 85 millones de euros» y «un gran impacto mediático» para Mallorca donde, asegura, se quiso fundar el que ahora es el Festival de Cine de San Sebastián.