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Será la primera vez que el fotógrafo Pep Bonet muestre en España su trabajo sobre el terremoto de Haití. Una proyección con las imágenes que tomó durante ocho días en el país caribeño, justo después de los movimientos sísmicos del pasado 12 de enero que provocaron la muerte de 230.000 personas, se contemplará hoy en la sala Golferichs de Barcelona. El 4 de junio, el montaje audiovisual cerrará el Festival Alternatilla en Es Baluard con música en directo del pianista José Bautista.
«Había muy poca esperanza durante los primeros días en Haití», comentó el fotógrafo, quien añadió que «la primera ayuda humanitaria había acabado de llegar pero aún no se había empezado a repartir». Bonet precisó que «retraté a los saqueadores que se dividían en los que robaban para hacer negocio y los que se llevaban hierro y madera para construir sus propias casas», y explicó que «me moví por libre con un conductor, fui a las fosas comunes, al centro de la ciudad que era donde todo sucedía y estuve con familias que buscaban a sus parientes entre los escombros». «Parecía un lugar de guerra, con muerte, violencia y destrucción por todas partes», recordó el mallorquín y avisó que «he tenido que suprimir las fotografías más sangrientas». El reportero mantuvo que «la parte más triste era el sufrimiento de la gente, que se encontraba en estado de shock», y tuvo que luchar contra «la visión de cuerpos quemados en medio de la calle y el olor que desprendían, presente la mayor parte del tiempo». En la catedral de Puerto Príncipe, Bonet consiguió una de las pocas imágenes de fe, la de una mujer rezando a los pies de una gran cruz entre las ruinas.
Regreso a Haití
«Una de las dificultades fue encontrar a demasiados fotógrafos y me sorprendió que los medios de comunicación marcharan a los pocos días», apuntó Bonet, quien ya documentó la vida en Haití hace unos años. El fotógrafo avanzó que «mi deseo es regresar a Haití dentro de un mes, en la época de lluvias, y ver el proceso de reconstrucción del país».
En Palma, Bonet también subastará dos fotografías cuya recaudación se destinará íntegramente a la Fundación Gift of the Givers, la mayor organización humanitaria de origen africano que financió el proyecto documental del mallorquín.