"Mestre" Tomeu forma ya parte de los grandes nombres de la cocina mallorquina. | Pere Bota

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El gran cocinero Tomeu Esteva Jofre, conocido como el «Mestre» Tomeu, ha muerto hoy en la clínica Juaneda a los 90 años, ha informado la Asociación Empresarial de Restauración de Mallorca.

Tomeu Esteva Jofre nació en Andratx (Mallorca) el 15 de junio de 1920. El 12 de marzo de 1932 vio por primera vez una cocina: fue la del famoso Gran Hotel de Palma, donde empezó a trabajar como aprendiz.

Cuatro años más tarde ya era el pinche de la cocina del Gran Hotel de Camp de Mar y en 1937 pasó al Gran Hotel Mediterráneo, pero en la Guerra Civil tuvo que abandonar temporalmente su empleo, aunque durante la contienda siguió trabajando de cocinero.

En 1940 se incorporó nuevamente a la cocina del Hotel Mediterráneo como ayudante y años más tarde ascendió a jefe de cocina del Hotel Alhambra y, desde 1955 del Hotel Bahía Palace.

Tomeu Esteva Jofre fue requerido en 1967 por la Escuela Sindical de Hosteleria de Baleares para dedicarse al magisterio de la gastronomía.

Desde entonces y hasta su jubilación, en 1975, formó a las nuevas generaciones profesionales de la cocina que hoy colaboran en los mejores restaurantes y hoteles de la isla.

Paralelamente a su actividad entre fogones, Tomeu Esteva se dedicó a la investigación culinaria y contó con una de las colecciones más completas de libros de cocina, así como con una singular colección que reúne más de once mil menús de diferentes épocas y lugares del mundo.

Entre ellas destaca la recopilación de recetas propias y ajenas que hizo en su vida, muchas de ellas perdidas en los recetarios antiguos y en las despensas de la cocina mallorquina.

Este trabajo dio lugar a una gran cantidad de recopilaciones, que han sido publicadas y difundidas por varios medios de comunicación.

«Mestre» Tomeu cocinó para las grandes personalidades que visitaron la isla y su fama cruzó fronteras; llegó incluso a hacer paellas en el Círculo Polar Artico.

La Asociación Empresarial de Restauración de Mallorca ha destacado hoy de Tomeu Esteva que fue, sobre todo, un hombre sencillo y lleno de nobleza por su calidad humana y por su sabiduría, de ahí que quienes le conocieron siempre le llamasen «Mestre» Tomeu.