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«Es un placer y un orgullo que internacionalmente se haya reconocido un canto milenario mallorquín como es la Sibil-la, muestra clara de nuestra centenaria identidad». Lo afirmó ayer por la noche en Madrid la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol, durante la fiesta organizada por el Ministerio de Cultura en el Museo Reina Sofía para reconocer diez manifestaciones españolas nombradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco. «Somos el único territorio que ha preservado íntegramente este canto milenario», añadió.

En parecidos términos hablaron el conseller insular de Patrimoni i Cultura, Joan Font, y el conseller de Cultura del Govern, Bartomeu Llinàs. «De esta manera se reconoce una tradición arraigada en la cultura mallorquina», señalaron.

El acto, para reconocer también otros patrimonios culturales inmateriales del país, como la dieta mediterránea, La Patum de Berga, la cetrería, el Silbo Gomero, el Misterio de Elche o el flamenco, entre otros, fue presidido por las ministras de Cultura y de Medio Ambiente, Àngeles González Sinde y Rosa Aguilar, respectivamente.

La ministra de Cultura afirmó que esta riqueza de la sociedad española «es quizá la raíz más honda de la diversidad» que se vive en el país. «Los premios de la Unesco garantizan su preservación», añadió. De esta manera, el organismo que vela por la cultura a nivel mundial, «hace que nuestras manifestaciones culturales más destacadas sean dignas de admiración».

El público invitado a la fiesta pudo disfrutar de la escenificación de el Cant de la Sibil-la que en la víspera de Nadal se escucha en las iglesias isleñas. Lo cantó un blauet de Lluc, Daniel Potrz, que recibió el reconocimiento de los asistentes por su interpretación de lo que es un canto religioso y «que gusta a todo el mundo», según Llinàs.

Finalmente, Armengol pidió el apoyo de todos para lograr que la Serra de Tramuntana sea declarada bien de la humanidad por la Unesco.

Asimismo recordó el apoyo a la Sibil-la de la cantante María del Mar Bonet, a la vez que agradeció la labor del Govern y del Obispado para conservar esta forma de fiesta religiosa.

Entre la delegación balear también se encontraban Biel Cerdà, director insular de Cultura; María Vanrell, de UM; Clara del Moral, del PP, y Maria Lluisa Mascaró, del PSM.

En el Reina Sofía se habían anunciado también una demostración de los castells , que finalmente, según dijo el conseller Joan Manuel Tresserras, no pudo ser porque «al ser día laborable» resultaba muy difícil reunir a una colla completa.