La programación escénica gana el pulso a la crisis con un éxito «inesperado»

¿Dónde radica el éxito de una obra de teatro o de un musical? Es la fórmula «secreta e imposible» que, tanto los espacios escénicos como las compañías, han intentando desvelar «sin éxito» en la mayoría de ocasiones. Esta cuestión se podría trasladar al «inesperado» éxito de la temporada de las pasadas fiestas. Los teatros de la Isla han llenado sus butacas con espectáculos «originales, diferentes y para todos los públicos», una situación que ha provocado «una metamorfosis» en el mercado. Algunos profesionales intentan dar respuesta a esta incógnita que ha plantado cara a la crisis.
«El teatro no ha sido uno de los sectores que más ha padecido la falta de público», señala Carles Molinet, de Iguana Teatre, cuya obra El sopar tuvo que prorrogar sus funciones en el Teatre del Mar de Ciutat, e incluso se realizó un evento especial de Nochevieja. «No ha habido un descenso tan pronunciado como en el cine o en otros ámbitos culturales. El espectáculo en vivo se ha mantenido mejor que cualquier otro sector», añade.
«Si es un buen producto, atractivo, comercial e interesante, la gente compra una entrada. Si la obra no interesa, por mucho que lo intentes y la promociones no va a funcionar. En época de crisis, el público elige y selecciona», apunta Tiana Cladera, de Mallorca So. La compañía ha tenido «muchísimo trabajo» la pasada Navidad, con cuatro obras en cartel: Zorro. El Musical (Teatre Principal y Artà), Peter Pan, con la que ha girado por la Isla colgando el cartel de ‘no hay entradas'; La bella i la bèstia, un conte cantat, en el Xesc Forteza de Ciutat, y el estreno de Les flors músties, en el Catalina Valls de Palma. A pesar de que todas ellas han funcionado «bien, unas mejor que otras», Cladera asegura: «Hemos notado una bajada de venta de entradas en comparación con el año pasado».
Metamorfosis
Por su parte, Miki Jaume, gerente del Trui Teatre, considera un «éxito» la pasada temporada de Navidad, con los estrenos de Tócala otra vez, Sam, con los televisivos María Barranco y Luis Merlo; la puesta de largo en el musical de la cuenta cuentos Victòria Sitjes, Maria Bimbolles. El Musical, y El Cantajuegos. «El mundo de la escena está cambiando y sufriendo una metamorfosis importante. Lo que tiene que cambiar, de forma urgente, es la programación del teatro público», indica Jaume.
Precisamente, en el Principal de Palma se han saldado con éxito el show del mago Miguel Gavilán, que «llenó la platea», informan desde el teatro; Prova, de Tic Teatre; Zorro. El Musical o Balagan, de Cirque Style.
Finalmente, el Auditòrium celebró las fiestas a ritmo de Ballant, ballant... la Història, de Embruixart, con cerca de 20 representaciones.