Santiago Mayol, Toni Gost, Òscar Mayol, Antoni Caimari, Joan Rotger y Antònia Fiol, ayer en un vagón del Tren de Sóller, durante la presentación del Solstici d'Estiu.

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Hay lugares idóneos para ejercitar la creación poética. El Tren de Sóller, que cumple 100 años, es uno de ellos. En sus ventanas residen «escudos» mironianos y en su interior coexisten cuadros de varios rincones de la Isla. El Solstici d'Estiu, de la Fundació ACA, quiere homenajear a este «patrimonio intangible y material de la sociedad». A este vehículo «vivo que interactúa con las emociones y las sensaciones de sus ocupantes», en palabras de Toni Gost, miembro de ACA. Lo hace con un recital poético, este viernes, a las 20.00, en el Museu Modernista de Can Prunera, Sóller.

Para llegar hasta el municipio, la fundación anima a los interesados a seguir una ruta junto a los poetas elegidos para esta 15 edición: Glòria Julià (Mallorca), Sergi Cleofé (Menorca), M. Paloma Miguel (Eivissa), Esteve Portes (Formentera) y Mireia Calafell (Barcelona). El trayecto comienza a las 10.50 desde la estación del Tren de Sóller en Palma. A las 14.00 comerán en un restaurante del Port de Sóller, y a las 16.00 harán una excursión a Deià con visita incluida a la Fundació Robert Graves. A las 19.00 los asistentes se fotografiarán con los poetas en la estación del Tren en Sóller y, finalmente, a las 20.00 empezará el acto en Can Prunera.

Esta decimoquinta edición «ha contado con una financiación de 5.500 euros», explicó Antoni Caimari, presidente de ACA. De esta cantidad, provienen 1.500 euros de una institución catalana y los 4.000 restantes, del Govern.

En estos 15 años ya han pasado por el Solstici d'Estiu más de 70 poetas. Hace dos que no pueden ir a Valencia por falta de presupuesto, pero aún siguen el itinerario de las islas y Barcelona. Caimari hizo hincapié en que el año que viene volverá a hacerse en julio, «que es lo que toca».