Así lo explicó ayer el vicepresidente de Cultura, Joan Rotger, quien señaló que «los técnicos han concluido que la visita guiada al castillo es posible, aunque hay cuestiones que se tienen que repensar». Por ese motivo, se decidió «suspender» el expediente en el que se solicitaba autorización para organizar visitas.
Debido al valor arqueológico y medioambiental de este Bien de Interés Cultural (BIC), el Consell pone prescripciones para contemplar en el nuevo proyecto, que deberá ser redactado por «un equipo multidisciplinar». Entre ellas, que las visitas «sean guiadas, no masivas y coherentes con las circunstancias del castillos». Además, entre otras cuestiones, Patrimoni rechaza el vallado del circuito, la plataforma mirador que se pretendía construir o la colocación de una veintena de paneles informativos de acero corten, que «no se justifican, ni en número ni por su contenido».
Por otra parte, Rotger confirmó que en el próximo pleno del Consell se aprobará que Can Lis, la casa que el arquitecto Jorn Utzon construyó en Portopetro y que ahora alberga una fundación que lleva su nombre, así como la sede de la administración insular situada en la calle Palau Reial de Palma, pasarán a ser Bien de Interés Cultural (BIC).
Respecto a las restauraciones, los técnicos han dado luz verde a la limpieza de los púlpitos de la Capella Real de la Seu y a la retirada del tornaveu, que se había instalado temporalmente en 2010 en uno de ellos. El tornaveu es una réplica no exacta, firmada por el arquitecto Elías Torres, de una pieza diseñada por Gaudí para hacer de altavoz del sonido y que nunca llegó a materializarse. También se aprobó documentar los grafitos del campanario de la Catedral.
Igualmente se dio permiso para colocar andamios en la fachada el Parlament con vistas a su rehabilitación y la orden de que antes de iniciar la obra «se haga un mapping donde se refleje claramente el estado de conservación y las patologías». Otro BIC, la Cartoixa, sufre problemas en la cubierta de las celdas 2 y 3 que se podrán reparar.
Finalmente, se autorizaron restauraciones en el Castell de Capdepera y el retablo de Sant Jeroni del convento de Santa Clara.
