Inició su andadura el 1 de septiembre de 2005 en un local de Passeig Mallorca. La sala Cultura Club se trasladó en 2006 al Passeig Marítim, donde cambió hasta tres veces de ubicación. Ahora, después de nueve años, cierra sus puertas plateadas.
La sala ha acusado la coyuntura económica –un alquiler elevado– y la falta de público. «Ya no hay escena indie, ya no tenemos sentido. Todo es una mezcla de nada», dice Ramón Caimari, que ha gestionado Cultura Club, junto a su socio, Vicente Martínez, desde su apertura. Una visión similar es la del DJ Sodapop, pionero en el despegue de la sala. «La fuga de cierto target se correspondió con la entrada a chorro en el local de una nueva clientela joven, muy joven, que comulgaba con la electrónica y abominaba totalmente los preceptos indies clásicos. De ese modo se gestó una nueva, descafeinada e ignorante nueva hornada de indies».
Estrellas
Por su escenario ha desfilado una ristra de nombres que militan en la liga de las estrellas. Peter Hook (New Order), Andy Rourke (The Smiths) o Nada Surf. También otros artistas de prestigio nacional como Los Planetas, Sidonie, Lori Meyers o Love of Lesbian. O grupos locales: L.A., The Last Dandies o The Prussians.
«Fue claramente lo que la gente de Palma deseaba que hubiera aquí, un club alternativo a la altura de los que puedes encontrar en Madrid o Barcelona», apostilla Ramón Caimari, quien inicialmente lo planteó como un centro cultural, con exposiciones. «El arte murió y nos quedamos con la música. La gente se cargaba y robaba los cuadros y las fotos».
El legado de Cultura Club continuará, «posiblemente», con una fiesta de noveno aniversario en Es Gremi prevista según Caimari para octubre. Después ya no hay intención de programar más conciertos.
18 comentarios
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Fué el propio Cultura el que decidió apostar por los jóvenes y los precios caros, en los últimos 5 años la media de edad bajó en picado y el problema es que los jóvenes se aburren pronto de casi todo. En Palma no hay suficiente gente de 25-30 años para llenar un Pub mediano,
para mi el declive empezó en el mismo momento que se trasladaron al paseo maritimo, mas que nada porque las pocas veces que fui ya habia perdido magia, ¿el motivo? evidentemente porque el tipo de gente que va por el paseo maritimo (pop, reaggeton, etc etc) quizas entraba en el Cultura un poco por despiste o por la novedad. Total: que de pasar a un ambiente que me (nos) encantaba, nos vimos rodeados de peña que no tenia nada que ver y que nos daba bajon. O sea: quillos por doquier. (sin despreciar a los quillos, claro, pero cada oveja con su pareja..... jeje)
Los hipsters deben estar hiperventilando...
animo cultura, buscad otro local, uno nuevo con carisma y no con este olor a gastado del maritimo, quizas uno cerca del kaelum i del soho. quizas fusionarse con la demence. quien sabe.
Que vuelva Zarabanda!! Q tiempos aquellos...!! :)
¡Se lo merecen! Me encantaba esta sala pero, como a otros muchos, terminaron echándome para no volver más gracias a la música y la nueva clientela a la que se esforzaron en atraer.
La escena indie sigue, fuisteis vosotros solitos los que os habéis cargado la sala
Veo que el local de arriba, lo que fue el Nimos, también está cerrado. Si es que con tanta competencia, hay que ser muy bueno para mantenerse.
Que fácil es criticar desde la ignorancia y asociar la música electrónica a grupos sociales determinados...donde otros solo ven xumba xumba otros (muchisimos) vemos los mismos sentimientos que te pueden transmitir cualquier otro tipo de música.Desde dentro todo el equipo de personal como seguridad organizadores camareras han sido siempre muy atentos y respetuosos con nuestro trabajo como djs siempre intentando dar una alternativa a la música comercial del paseo y casi siempre lográndolo con éxito.Es una lástima el cierre para los que tantas noches mágicas hemos vivido allí....te echaremos en falta Culturaclub!!
Yo era clienta hasta que empezaron a poner música electrónica... El problema además, era el personal que parecía que te perdonaban la vida cada vez que te servían una cerveza. Por no hablar de la pérdida de personalidad del local cuando pintaron las paredes de amarillo. Espero que vuelvan a abrir en otro sitio un Cultura como el que había en el Palas Atenea. ¡Que buenos recuerdos!