De izquierda a derecha: Juan M. Tello, Marcos Callejo, Irene J. García, Jon Urchegui y Rubén Gallardo, miembros del equipo de rodaje de ‘Zero’. | Jaume Morey

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El largometraje amateur y de bajo presupuesto 'Zero', dirigido por Marcos Callejo y escrito por Carla Martínez, se inauguró este jueves en los cines Rívoli de Palma, con un aforo completo de 250 personas, el Films Infest. Creado por Antoni Caimari, es el primer certamen de cine de autor y cine independiente de Mallorca.

Con referentes como '1984', de George Orwell; la serie 'Black Mirror'; la saga cinematográfica 'Divergente'; 'Un mundo feliz', de Aldous Huxley o el mismísimo Platón, Zero es un viaje al año 2042, en una sociedad fragmentada por clases sociales claramente delimitadas y en la que cada ciudadano tiene una función concreta a desempeñar. De hecho, los estamentos que se plantean coinciden con los estratos sociales que ya propuso Platón para su república ideal: primarios, que serían los sabios; los algebras, que se corresponderían con los guerreros y los fraccionarios, con los artesanos. Sin embargo, la guionista, Carla Martínez, añade otro: los eliminados, aquellos que ni se consideran ciudadanos al cuestionar el régimen.

«Al principio, Enas es muy ignorante y cree que vive en un mundo feliz y lleno de paz. Pero, a medida que avanza la película, ella y el espectador se dan cuenta que todo es una gran mentira», explica Irene J. García, que encarna a la protagonista. «Es una distopía, todo lo contrario a una utopía, una mezcla de drama y ciencia ficción», añade.