Los redactores de Ultima Hora Enric Elosúa y Urko Urbieta comentan 'Han Solo: Una Historia de Star Wars'. | Ultima Hora

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Ni siquiera los estudios Disney están seguros de que Han Solo, centrada en la juventud del legendario personaje interpretado por Harrison Ford en cuatro películas de la saga Star Wars, vaya a funcionar en la taquilla. Aunque sus responsables se han apresurado a hablar de hasta dos posibles secuelas, su futuro a día de hoy es una incógnita. El semidesconocido Alden Ehrenreich (¡Ave, Cesar!), Donald Glover (Atlanta), Emilia Clarke (Juego de tronos), Woody Harrelson (Tres anuncios en las afueras), Paul Bettany (Master  & commander), Thandie Newton (Westworld) y la británica Phoebe Waller-Bridge (Fleabag) encabezan el reparto de la película, cuyo rodaje estuvo plagado de problemas, despidos y tensiones.

Sobre el papel, la premisa de la película es muy apetecible. Han Solo pretende relatar la juventud de este antihéroe de buen corazón; cómo llegar a hacerse con los mandos del Halcón milenario y conoció a su inseparable Chewbaca y a Lando Calrissian, así como a su primer amor antes de Leia. Tras su presentación a todo trapo en el Festival de Cannes, es hora de que la audiencia dé su veredicto.

Cuando Disney anunció hace cuatro años hasta tres spin offs de la multimillonaria saga galáctica, muchos fans se llevaron las manos a la cabeza, mientras los ejecutivos del estudio solo pensaban en la caja registradora. La primera cinta, Rogue One (2016), fue toda una diana en la taquilla. Bien por ellos. Pero entonces llegaron los rumores sobre el rodaje de Han Solo. El pasado verano se despidió a los directores del film, Chris Miller y Phil Lord, así como Chris Dickens, montador de la cinta.

El reputado Ron Howard (Oscar al mejor director por Una mente maravillosa) entró en el proyecto para realizar «algunas secuencias», pero la realidad es que «ha vuelto a rodar la cinta de principio a fin», ya que la interpretación del actor Alden Ehrenreich –seleccionado tras descartar a la mayor parte de actores jóvenes del momento en la industria– no convencía a nadie. Según los mentideros de Hollywood, «su trabajo se parecía más al de Jim Carrey en Ace Ventura que al de Harrison Ford». El actor, presa del pánico, acordó con el nuevo realizador contratar a un coach que le ayudara a resolver su papel.