Fuentes del Palau han indicado que ante «las limitaciones técnicas y patrimoniales» que han ido surgiendo al irse concretando cómo podría ser este trabajo, también se ha cancelado el concierto «performático» previsto para los días 8 y 9 de abril, junto al Orfeó Català y los Coros de la Escuela Coral.
El pasado mes de abril, el director artístico del Palau, Víctor García de Gomar, explicó en rueda de prensa que la intención era «cambiar la piel del propio Palau, prácticamente borrar lo que hay, convertirlo en una cueva».
Sin embargo, García de Gomar ya reconocía en aquel momento que había límites, porque el edificio del Palau es patrimonio de la humanidad.
Sobre el concierto, avanzó que se preveía que pintor y músicos ocuparan el escenario, donde se debía estrenar una obra encargada al compositor Pascal Dusapin, de unos quince minutos de duración, aunque también con música improvisada y con grabaciones estereofónicas realizadas en la cueva francesa de Chauvet.
Barceló, además, en diálogo con los cantantes, tenía previsto entrar y salir de escena «disparando barro contra los coros» y también crear una «escultura sonora», que debía permanecer en el Palau durante unas semanas.
Está previsto que durante el mes de septiembre se trabaje en la reformulación del proyecto y se vea qué tipo de colaboración puede acabar existiendo entre el Palau y Miquel Barceló, artista plástico invitado de la próxima temporada.
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