Rodrigo es un pintor de origen mallorquín que reside en Nueva York, donde saborea las mieles del éxito como el artista del momento. Aparentemente lo tiene todo: un gran talento, un estudio multimillonario en el Soho, una invitación exclusiva a exponer en eventos como la feria Art Basel, y amantes por doquier; pero le falta algo: el amor verdadero. Este es el punto de partida de The Beautiful Dream of Life: A Novel (2017), la primera y única novela de Domingo Zapata (Palma, 1974), que ahora el creador llevará a la gran pantalla en el que será su debut como director de cine. En esta entrevista, el pintor y escultor balear más internacional avanza las claves de este filme que se empezará a rodar entre enero y febrero de 2022 en localizaciones como Nueva York, Miami, Florencia, París, Andalucía y, por supuesto, Mallorca.
¿De dónde surge su inquietud por el mundo del cine?
—Siempre me ha llamado mucho la atención este mundo, pero nunca había tenido la oportunidad. Todo empezó cuando una productora muy importante de Hollywood se interesó en adaptar mi novela. Yo acepté con una condición: que me dejasen dirigirla. Obviamente, tendré la ayuda de un buen equipo para poder expresar mi visión, porque quiero hacer una película muy artística.
¿Quiere ser director de cine?
—No quiero ser director de cine, ni me quiero dedicar a este mundo, pero quiero hacer esta película. Por ahora, solo estoy comprometido con este filme. Mi intención no es dar un giro a mi carrera y dedicarme a este mundo, solo quiero expresar una visión que llevo dentro. Es algo que ya expresé con la novela y no soy escritor, ni novelista. Tenía que contar esta historia y así lo hice. Una editorial importante la publicó, fue un bestseller internacional, es una novela de peso que merece una oportunidad de convertirla en película. Quiero participar en ella, poder dirigirla.
¿Es una novela autobiográfica? ¿Qué hay de Domingo Zapata en ella?
—No es una película autobiográfica, pero obviamente, y lo digo de nuevo, no soy director, simplemente un artista. Entonces, si voy a hablar de un personaje en una novela, hablo de la nueva de un artista, que es lo único que conozco. A partir de ahí, aparecen anécdotas que son mías, pero muchas otras no, algunas historias están basadas en hechos reales, pero también hay algunas ficticias. Se rodará también en Mallorca, el personaje es de origen mallorquín y es conocido..., pero lo que es la realidad de la historia no tiene nada que ver conmigo.
¿Dónde más se va a rodar?
—Aquí en Mallorca estaremos en Palma y Valldemossa, también en Nueva York, donde arrancará el rodaje; Miami, Florencia, París y Andalucía.
¿Significa esto que tiene pensado hacer una pausa en la pintura?
—No es un stop, simplemente ahora me voy a centrar en la película. He estado pintando mucho durante la pandemia y tengo tres compromisos importantes para lo que queda de año: en Santo Domingo el 16 de septiembre, después en Tokio, si la situación lo permite, y también tengo el Art Basel de Miami. Ya tengo todas las obras preparadas, está todo hecho.
¿Con qué productora o estudio se grabará la película?
—Vamos a trabajar con un equipo americano que ha trabajado en películas de gran calibre, y también con un equipo español, que también ha estado en producciones importantes. Algunas de esas cintas han sido nominadas a los Oscar, son profesionales de primera categoría. Aunque mis pretensiones no son esas, mi objetivo es hacer una pieza de arte para que la gente pueda disfrutar.
¿Y el reparto?
—No podemos contar nada del cásting, pero todos son de primera categoría, la gran mayoría con nominaciones importantes. Estamos preparando algo que estará bien hecho, lo quiero hacer bien. Luego que me salga bien o no, ya veremos [risas]. El director de cásting es muy bueno, no me podrían haber dado una oportunidad mejor.
¿Qué plazos tiene? ¿Cómo se está preparando?
—Tiene que estar lista y estrenada en menos de dos años. Me estoy preparando y estudiando mucho, buscando un buen director artístico que me ayude a expresar mi visión.
La trama del filme girará en torno a un artista que lo tiene todo, menos el amor. ¿Es eso lo más importante al final?
—El amor es eterno, vive en el alma. La película va sobre la vida de un pintor que lo tiene todo, pero también un vacío interior muy grande. Un día se enamora de una mujer, Carlotta, y todo cambia. El amor nos cambia a todos. Llena ese vacío, pero un día se despierta y se da cuenta de que Carlotta vive en sus sueños, pero el amor sigue siendo real. Se obsesiona con dormir para soñar y estar con ella y llega un punto en el que pierde el norte entre la realidad y los sueños. La película es una historia de amor, un drama muy bonito, que nos puede pasar a todos.
El arte también es protagonista.
—Cuenta la vida de un artista y quiero mostrar todo el mundo del arte, lo que no se ve, lo que está detrás. La locura de los artistas y el peligro de la fama, el éxito. En ese mundillo hay muchas tragedias y quiero focalizar la atención en ese problema importante que existe.