Francesc Rosselló y Tolo Cañellas, en la galería Horrach Moyà.  | M. À. Cañellas

TW
0

Desde cuadros de pequeño formato pintados justo este viernes hasta pinturas de grandes dimensiones realizadas en el pandémico 2020, Francesc Rosselló (Palma, 1994) protagoniza su primera exposición individual en la galería Horrach Moyà de Palma(Catalunya, 4), una propuesta en la que exhibe su universo «punki». Bajo el título I Miss You(Only on Fridays), Rosselló enseña piezas basadas en sus vivencias, aunque ficcionadas, como apunta el comisario, Tolo Cañellas, y en la de sus amigos. «Es difícil pintar a una persona de la que no conoces sus defectos», apunta Rosselló. El artista entremezcla estas experiencias y «residuos» y crea collages de experiencias que pertenecen a una «realidad paralela».

Los colores vivos, pero también grises, predominan en las creaciones de Rosselló que, poco a poco, se vuelven más sintéticas. Los paquetes de cigarros, los tatuajes y las marcas pueblan muchas escenas como «símbolos» que indican que hablan del «aquí y ahora». Tolo Cañellas coloca primero las obras más recientes, terminadas hace apenas horas, en la entrada de la galería. Estos últimos trabajos «respiran más» y no contienen tantos personajes como las de hace unos meses. Asimismo, Cañellas ha concebido el montaje como unos «regalos» que ofrece al espectador curioso que se adentre en este espacio. «El que llegue hasta el final de la exposición y se dé la vuelta, encontrará algunas obras más, a priori ocultas», avanza. De la misma manera, los trabajos de Rosselló aguardan detalles que no se perciben a primera vista.

El humor, destacan Cañellas y Rosselló, es también muy valioso y, por desgracia, lamentan, está poco presente en el mundo del arte. «El humor te permite tratar temas importantes que serían difíciles de abordar de otro modo. Además, te da la posibilidad de llegar a más público», coinciden.