Mar y Ona Vanegas junto a Mar Fiol, codirectora del corto. | C, Miró

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El confinamiento puso patas arriba el mundo tal y como conocimos. En Mallorca, el verano de 2020 mostró una cara surrealista, con las playas vacías, sin turistas. Aquel paisaje desértico inspiró Temporada baixa, un cortometraje dirigido por Mar Fiol y Joan Fullana. «eDe pronto no reconocimos aquellos lugares, algo tan vacío y tan potente que ya de por sí explicaba muchas cosas», apunta Fiol.

El corto, producido por Bastera, habla sobre todo, en palabras de Fullana, de los «espacios inertes y muertos de la temporada baja, espacios concebidos única y exclusivamente para el turismo, para sacar un provecho concreto. Pero el resto del año, permanecen abandonados y se vuelven fantasmagóricos». «De ahí nace la reflexión y la pregunta de qué pasa con todos estos espacios, por qué Mallorca está llena de gente que no tiene donde dormir o que está bajo el umbral de la pobreza. Es una gran paradoja y es todo muy absurdo», cuenta.

El filme, protagonizado por Aina Segura, Pedro Mas, Ona Vanegas, Aina Frau, Mar Vanegas y Zihui Bardi, cuenta la historia de una abuela (Aina Frau) y sus dos nietos (Ona y Mar Vanegas) que ocupan, provisionalmente y en secreto, una habitación de un hotel cerrado por temporada baja. «La desconexión con la realidad de la anciana contrasta con la autonomía de los dos jóvenes, que hacen de la pillería su fórmula de subsistencias». La producción la firman Bàrbara Ferrer, Virginia Galán y Caterina Mas. El rodaje se ha llevado a cabo esta semana en Sant Elm, Peguera y Palmanova y ahora está en proceso de montaje y edición.