El ciclo 'Sons de Nit' acoge al gaitero más universal

La gaita es una patria sin frontera, y Carlos Núñez su mejor embajador. El gallego nació con una bajo el brazo para retratar instantáneas de su tierra natal, y hoy acumula premios y más de un millón de discos vendidos, consiguiendo lo que parecía imposible: que un músico de raíces se transforme en algo parecido a una estrella del pop. En su último trabajo, Inter Celtic (2014), nos desvela las estancias más luminosas de su universo creativo, enfatizando en la conexión celta que une diferentes territorios a través de un conjunto de temas coloridos, atemporales y de impecable factura, en los que se rodea de primeras figuras como Ry Cooder, Sharon Shannon, Alan Stivell, y sus mentores, The Chieftains, entre otros. Este álbum incluye éxitos recientes así como participaciones en bandas sonoras no incluidas en discos anteriores.

Músico superlativo, aseguran que a muy tierna edad se le recuerda aleteando los dedos por las calles de su Vigo natal, como si acariciara una flauta invisible. Hoy, a sus 51 años, ha obtenido un Premio Ondas y dos candidaturas a los Grammy latinos, así como un buen puñado de distinciones y galardones. Además, ha sido nombrado Embajador Europeo del Medio Ambiente y actuado en Roma ante dos millones de personas, convocadas por el Papa (un récord solo igualado por The Stone Roses en su concierto de 1990 en Spike Island). Nunca dio la gaita una estrella tan universal.

Precisamente, dada su condición de Embajador Europeo del Medio Ambiente, Núñez es el artista idóneo para tocar en el Santuario de Lluc, un lugar abrazado por la naturaleza, situado en plena Serra de Tramuntana. «es un artista con una especial sensibilidad por la naturaleza y el planeta», ha declarado la organización del evento. Por otra parte, la fecha del concierto ha sido elegida expresamente para marcar el aniversario de la declaración de Patrimonio Mundial de la Serra de Tramuntana por parte de la Unesco.