Se han contado infinidad de historias terribles –y muy necesarias– acaecidas en los campos de concentración nazis, pero pocas abordan el dolor con cierto sentido del humor o son narradas por alguien que estuvo a punto de entrar en el mismísimo infierno y, al final, se salvó milagrosamente. Coraje de madre es una de esas historias reales. Este sábado, a las 20.00 horas, se estrena en el Teatre Principal de Palma.
El montaje, que es una coproducción del Principal junto a Teatro de La Abadía y la compañía Ur Teatro, se basa en la experiencia que vivió la madre del autor húngaro George Tabori, quien se salvó de ser deportada a un campo de exterminio. «La experiencia con Tabori nos ha renovado el pensamiento sobre estos temas tan sensibles y un tema clave: cómo representar lo irrepresentable», ha destacado este viernes en rueda de prensa la directora de la pieza, Helena Pimenta.
La acción transcurre cuando los nazis entran en Budapest y empiezan las deportaciones masivas. Entonces, la madre del escritor, Elsa Tabori, «sale sin ningún miedo a la calle, un gesto excepcional que habla de su coraje». Sin embargo, es detenida y enviada a Auschwitz. Durante el trayecto, conoce a un comandante alemán que «milagrosamente la salva de la muerte» y puede volver a su vida normal. Así, «se pasa un día viajando a los infiernos y luego regresa a la normalidad».
Pere Ponce, uno de los intérpretes del montaje junto a Carmen del Valle, David Bueno, Xavi Frau y Sacha Tomé, señaló que «Tabori tiene la capacidad de usar el humor para no estancarse en los momentos tan duros de sentimentalismo». «Reflexiona sobre la relación con su madre, que antes era un ser lleno de luz y tras la experiencia vivida se convierte en una persona cerrada y oscura, que se siente culpable, como si hubiera traicionado a su pueblo, por no haber muerto como ellos», añadió el actor.
«Solo un judío puede reírse del exterminio, nosotros hemos sentido pudor al hacerlo, pero defendemos la visión de Tabori que así lo quiso. El público se encontrará con esta cuestión: se reirá de algo y, a continuación, se preguntará por qué se está riendo».
Asimismo, el equipo recalcó que fue la madre del autor la que le motivó a escribir el relato a través de lo que ella había plasmado en unas cuartillas, demostrando el «poder terapéutico del teatro y de la comunicación». «Hablando de ella apela también a todos los que se quedaron en los campos y nunca regresaron. En estos tiempos en que las cifras de víctimas son solo eso, cifras, es necesario escuchar estos relatos y conmovernos», concluye Ponce.
Para Carmen del Valle, que se estrena en esta función como Elsa Tabori, ha expresado que el proceso le ha servido para «tomar conciencia del horror que existe en la tierra». «Es un viaje emocional brutal que, como actriz, te deja derrotada, porque pasas de la comedia y la ligereza a la cruel realidad».
Por otra parte, el mallorquín Xavi Frau celebró el poder participar en esta producción, que sigue la línea que llevó a cabo Josep R. Cerdà, el anterior director del Teatre Principal de Palma, quien «apostó por llevar a cabo coproducciones con compañías de la Península, creando así conexiones con otros territorios, venciendo la insularidad».
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