David Barro, Pilar Ribal, Joan Guaita, Antònia Maria Perelló, Fernando Gómez de la Cuesta, Magdalena Aguiló, Isabel Pérez y Toni Garau, este jueves en el Casal Can Balaguer. | Jaume Morey

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Desde su matrimonio con la extremeña Mercedes Guardado, Wolf Vostell tuvo una relación especial con España. No en vano, existe un museo Vostell en Cáceres. Pero el autor no tuvo relación solo con Extremadura, también trabajó diferentes proyectos en Mallorca. El Casal Balaguer presenta esta tarde Connexió Vostell. Berlín-Malpartida-Palma, una exposición que repasa sus proyectos en la Isla. Comisariada por Magdalena Aguiló, la muestra se podrá ver hasta el 29 de septiembre. Ayer la presentaron a medios, junto a Aguiló; el coordinador general de Cultura de Cort, Fernando Gómez de la Cuesta, y el diseñador del montaje, Antoni Garau.

La muestra presenta piezas de colecciones privadas que no se han expuesto nunca. «Quiero destacar la generosidad de los prestadores. Es estimulante estudiar la relación de Vostell con Mallorca, ya que no estaba documentado. Lo representó, en su momento, Joan Guaita, un referente del arte contemporáneo, que cedió diversas piezas para la muestra, como un retrato como máquina de afeitar», señaló la comisaria de la muestra, a la vez que destacó que las piezas que forman parte de la exposición son mayoritariamente de los años 90, la última década del creador. La colección agrupa más de 60 obras entre esculturas, dibujos, pinturas, fotografías y grabados.

«En 1994 presentó una instalación en Arco que interesó al galerista Ferrán Cano, pero fue imposible por temas económicos», señaló Aguiló, a la vez que destacó los proyectos de Vostell en la Isla que forman parte de la muestra como El Toro de Sóller, Els Fars, Sarajevo en la Fundación Miró, y Afrodita de Palma, una propuesta escultórica pensado para el aeropuerto.

Faros

El proyecto de Els Fars consistía en una intervención de cuatro artistas contemporáneos sobre faros. Vostell diseñó un fotomontaje con un avión de una sola ala, un elemento central en su simbología que remite a la idea de vida y muerte. «Se trataba, para él, de un elemento que facilita la comunicación pero también la destrucción», en palabras de Aguiló. Otra de las acciones de Vostell en la Isla fue la performance que realizó en la Fundació Miró, Sarajevo. 3 pianos fluxus, en la que usó pianos y sierras eléctricas, entre otros elementos. Se instalaron, durante la acción, pantallas exteriores para que los asistentes pudieran seguir la performance.

David Barro y Magdalena Aguiló
En la muestra se puede ver un 'collage' realizado con cemento líquido, propiedad de la Col·lecció d’Art Serra.

Otra de las intervenciones destacadas es El Toro, que Vostell realizó en la finca Ses Tanques de Sóller por encargo de quien fuera presidente del Grup Serra, Pere A. Serra. Se trata de una pieza monumental elaborada in situ con más de 30 toneladas de cemento. En la muestra se puede ver un collage realizado con cemento líquido, propiedad de la Col·lecció d’Art Serra, que representa una mujer desnuda rodeada por una bestia. «Es una pieza muy especial que habla de la indefensión de la mujer», señala Aguiló, a la vez que añade que «El Toro tiene un precedente en el museo de Malpartida. Es importante por varios motivos. Por un lado, vemos la permanencia de una idea materializada cinco años antes. El Toro es una obra relevante dentro de la trayectoria del artista».

El último de los proyectos de Vostell en la Isla fue Afrodita de Palma, una escultura que nos e pudo instalar y que estaba pensada para el aeropuerto. La exposición muestra toda la documentación, aportada por Pilar Ribal, que hizo de intermediaria entre el artista y AENA. La muestra cuenta con la colaboración de otras instituciones como Es Baluard, la Fundación Miró y el museo de Malparida de Cáceres, que han cedido obra.