Victor Ishchuk, (director), Evgeniy Lagunov (primer bailarín) y Valeria Dennis (traductora)

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A pie del paseo marítimo, el Auditòrium de Palma abre sus puertas para recibir el «clásico y tradicional» espectáculo de El Lago de los Cisnes de la compañía de Ballet de Kiev. El encuentro empieza la noche de este martes a las 21.00 y también tendrá lugar este miércoles a las 20.00. Las entradas están casi todas agotadas, y tal y como confirman, suelen llenar el aforo allá por donde van, recibiendo siempre un buen feedback del público.

La función, compuesta por 35 bailarines más todo un equipo de técnicos, es un clásico que lleva 150 años en los teatros de todo el mundo. Así pues, versa «entre la vida o muerte, el amor, odio y lo que nosotros encontramos a día de hoy en nuestras vidas», ha explicado Viktor Ishchuk, director del Ballet de Kiev.

Además, la compañía ha estado recaudando dinero para las familias que han sido afectadas por la guerra de Ucrania. «Hemos recaudado ya más de 300.000 euros en estos dos años y da gusto que con nuestro arte podamos ayudar así», ha señalado Ishchuck. Asimismo, explican que una parte del dinero recaudado va destinado a cubrir las necesidades de las familias, niños y niñas, concretamente consiste en una «donación a UNICEF para apoyar su trabajo en la emergencia de Ucrania de 1€ por cada entrada vendida». De este modo, apuntan que es muy emocionante que más de 800.000 niños hayan podido ser ayudados. En este sentido, Evgeniy Lagunov, primer bailarín, ha subrayado como parte de los artistas estar «encantados de ayudar».

Por su parte, la guerra iniciada en 2022 sigue dejando una huella en sus memorias e indican estar siguiendo la situación ya que les afecta, puesto que la mayoría de sus familiares están en Ucrania. A su vez, Ishchuk ha dedicado unas palabras de agradecimiento, «gracias a España y a todo el país que nos da una oportunidad, como conseguir papeles, trabajar y tener una vida normal, muchas gracias por eso».

De igual forma, «el desafío más grande que hay es la lucha contra ti mismo porque el ballet es un arte muy difícil que requiere muchas horas, entonces hay que tener mucha disciplina», informa el director. «Hay que amar mucho el ballet y odiar a sí mismo», añade.

Con todo, es una actuación estructurada en cuatro actos y acompañada de la representación en solo Odette- Odile de Elena Germanovich; la solista principal del Ballet de Kiev desde 2022, y de El príncipe Sigfrido de Evgen Lagunov. Es un espectáculo abierto a todos los públicos en el que los asistentes podrán encontrar «un espectáculos, bailarines bailando, pero tenemos que pensar que eso lleva muchísima preparación detrás, no solo bailarinas en tutú, son técnicos, pintores, y un gran team» concluyen.