El festival se celebra desde 2019 en el Claustre de Pollença. | Tolo

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El Claustre de Pollença acoge desde hace cinco años un festival de música clásica que cambia de nombre en cada edición coincidiendo con la efeméride de un gran compositor pero mantiene siempre el mismo espíritu: trasladar a un público profano este género musical de manera didáctica y accesible.

El pianista Magí Garcias y el director de orquesta Bernat Quetglas se embarcaron en plena pandemia en un proyecto que ha conseguido hacerse un rincón en el competitivo circuito de festivales y fidelizar un público que va creciendo en cada edición. Garcias explica que «este año celebramos los cinco años del festival con una doble efeméride de dos compositores románticos como son Giacomo Puccini y Antonin Dvorak. Son dos autores fundamentales para entender este momento histórico. El primero es uno de los máximos exponentes de la ópera italiana y el segundo un compositor que tocó dos los registros con maestría».

Magi Garcias.

El pianista mallorquín cuenta que «el formato es muy didáctico ya que normalmente este tipo de festivales proponen una serie de artistas con un programa libre y grandes figuras. Nosotros tenemos la particularidad de que nos centramos en aquella persona que desea conocer por primera vez y sumergirse en este universo podrá hacerlo durante casi un mes y descubrir en directo una música pensada apropósito».

La reconocida soprano italiana Caterina Meldolesi protagonizará Tosca junto a un elenco formado por mallorquines. En la segunda semana, Aitor Hevia, Premio Nacional de Música, unirá fuerzas con el mismo Magí Garcias y la celista Zuzanna Sosnowska para el concierto de música de cámara. La orquestra de cámara de Mallorca cerrará el ciclo el 21 de septiembre con la Sinfonía del Nuevo Mundo.
Garcias continúa explicando que «nuestros precios son de los más asequibles en este tipo de eventos en Balears, sino el que más. Que así sea forma parte de nuestra vocación para divulgar la música clásica y que todo el mundo pueda permitirse una entrada para llegar a la gente sin lucrarnos nosotros».

Futuro

A pesar de eso, uno de los dos impulsores del ciclo expresa que «nos encontramos en una situación donde la adversidad nos ha cogido por sorpresa y a última hora por lo que perdimos una parte básica para la supervivencia del festival. Nos vimos obligados a reestructurar varias cuestiones internas para asegurar que la edición de este año para poder tirar adelante el proyecto».

Garcias asevera que «nos gustaría que la gente entendiera que nosotros no somos ni una empresa privada ni una fundación con apoyo público. Nosotros no nos lucramos, fomentamos la música y la cultura con la intención de poder ofrecer unas condiciones dignas a los músicos y demás profesionales. Con estas condiciones sería muy difícil programar una orquesta en la que trabajan unos 50 o 60 músicos».

Bernat Quetglas.

Para ayudar a solventar esta situación Garcias cuenta como «esta semana hemos abierto una línea de financiación colectiva en la plataforma GoFundMe para conseguir 3.500 euros y asegurar la supervivencia del proyecto. Todos los donantes serán amics del festival y escribiremos sus nombres en el programa de mano del año que viene».